Flores de Bach: Escleranto

El escleranto es un arbusto anual con flores de color verde claro u oscuro, dependiendo de las características del suelo. Es difícil de encontrar porque se mimetiza a la perfección con el entorno, pero suele crecer en trigales y en suelos arenosos y llenos de guijarros. Sus flores brotan entre mediados de verano y principios de otoño, formando ramilletes.

 

Relacionado con la capacidad anímica del equilibrio interior y de la unicidad en la universalidad, se encuadra en el grupo de la Inseguridad y el Dr. Bach lo definió para "aquellos que son incapaces de decidir entre dos cosas, inclinándose primero por una y luego por la otra. Suelen ser personas tranquilas, calladas, que sobrellevan solas su dificultad, pues no se sienten inclinadas a dialogar".

 

 

La indecisión ante diferentes alternativas

El estado escleranto se caracteriza por la vacilación y la incapacidad para decidirse entre diferentes

alternativas. Es un modo de vida extenuante, ya que se invierte mucha energía y finalmente no se consigue nada.

 

Las personas escleranto viven constantemente con la sensación de estar en un dilema. Suelen ser personas versátiles, intelectualmente estimulantes y capaces de ver, gracias a su flexibilidad interna, las dos caras de un problema. Pero en la práctica son incapaces de decidirse por una de ellas. Quizás por eso, la imagen que mejor se ajusta a esta flor es la de la balanza: igual se inclina hacia un lado que hacia otro.

 

 

Algunos síntomas físicos

La falta de equilibrio interior en este estado se evidencia en trastornos físicos extremos: estreñimiento y diarrea, fiebre e hipotermia, ansia e inapetencia. Por este motivo, el escleranto puede ser eficaz durante el embarazo. Debido a su naturaleza oscilante, el individuo puede sufrir extremas oscilaciones de ánimo y pasar con facilidad del llanto a la risa, de un júbilo excesiv

o que eleva a la persona al cielo, a una mortal tristeza. La falta de armonía y equilibrio interior pueden derivar en frecuentes crisis nerviosas y en una falta de concentración que le hace, en la conversación, saltar de un tema al otro.

 

Por todo esto, el escleranto es útil para ayudar a centrar el pensamiento de manera que se puedan valorar con claridad las distintas opciones y comenzar a confiar en el propio poder de decisión. Igualmente, aporta estabilidad ya que es una valiosa ayuda para creer en las propias decisiones. Mejora la capacidad de decisión y la fe en uno mismo.