Uno de los principales secretos de una piel que luce saludable es la calidad del sueño. La magia sucede en la noche.
Durante la noche descienden los niveles de cortisol y se elevan los de la hormona del sueño.
El metabolismo de la piel es mayor en esta fase del día, por lo que se produce la eliminación de toxinas acumuladas a través de los poros, se da la regeneración celular, así como la renovación de las fibras de colágeno y elastina, vitales para la piel.
Tu piel trabaja de noche
El ritmo circadiano juega un importante papel en las diferentes funciones biológicas regenerativas del cuerpo. El organismo cumple un ciclo vital de día y otro de noche para mantener el equilibrio.
Mientras realizamos las actividades del día, las células de la piel actúan en defensa a los ataques del medio ambiente, la exposición a los rayos UV y el daño de los radicales libres.
Ya en la noche, al cambiar el ritmo circadiano el cuerpo cambia a modo regeneración activa, listo para reparar todos estos por medio de la producción de sustancias que protegen y renuevan. Entre la media noche y las 4 de la mañana el flujo sanguíneo aumenta, lo cual beneficia los cambios celulares y la misma regeneración de la piel.
El buen dormir estimula la liberación de la melatonina que además tiene altas propiedades antioxidantes y por ende antienvejecimiento.
Igualmente se libera la hormona del crecimiento humano que aumenta la masa muscular así como la tonicidad de la piel.
Prepara la piel para su fase de renovación
De día la piel está en modo PROTECCIÓN y en la noche pasa a modo RENOVACIÓN. ¡No para el órgano más extenso del cuerpo humano! Por ello es mejor ayudarle a prepararse para la tarea nocturna.
Durante la noche la piel es más permeable para aprovechar los productos tópicos que se usan para su cuidado, así que aunque tiende a perder agua, la buena noticia es que mientras duermes mejora al máximo el proceso de renovación natural y maximización de la hidratación.
Sigue los siguientes consejos y verás los resultados en la apariencia de la piel:
Duerme entre 6 y 8 diarias de forma profunda.
Evita mantener encendido el televisor u otros agentes perturbadores del sueño para que se segregue la melatonina necesaria en la noche
Cumple una rutina de limpieza según tu tipo de piel facial para que los poros hagan la depuración.
Aprovecha la noche para aplicar productos hidratantes que se absorben mejor en esta fase del día.
Practica alguna actividad relajante antes de irte a la cama, tu piel lo agradecerá.
Cada uno de los procesos reparadores de la piel mientras gozamos del sueño profundo se ve optimizado adicionando un estilo de vida rico en una alimentación balanceada, la práctica de ejercicios físicos y la ingesta de abundante agua.