Una de mis pasiones "secretas" es disfrutar de una buena copa de vino y enoturismo. En este sentido, voy a traeros un artículo en aras de la moderación,
El vino ha sido objeto de intensos estudios a lo largo de los años y se ha demostrado que es un elixir eficaz. ¿Quién dice que un hombre necesita una fuente de juventud para vivir una vida larga? Sírvase una copa de vino y embotelle algunos beneficios sorprendentes. Recopilamos algunos datos y curiosidades interesantes sobre cómo el vino puede afectar su salud. Tómelo a la ligera, conozca su bebida preferida y beba con moderación.
El vino ha sido objeto de numerosos estudios que han encontrado diversas conexiones entre la mejora de la calidad de vida y su consumo. En la antigüedad, debido a la escasez de agua, el vino se ha convertido en una necesidad esencial en la vida más que en un lujo, por lo que llegó a simbolizar el sustento y la vida. Incluso en los primeros tiempos, el vino ha demostrado su valía cuando se trata de mantener la vida. Hasta ahora, todavía hay investigaciones en curso sobre por qué el vino es considerado uno de los elixires más poderosos que conoce el hombre.
Sin embargo, lo primero que hay que tener en cuenta es que la cantidad importa, y la mayoría de los estudios muestran los resultados en copas por día o por semana. De todos modos, se ha demostrado que guardarlo todo durante una semana para darse un atracón durante el fin de semana está asociado con cero beneficios para la salud. Así que nuestro consejo es que saborees cada sorbo, sientas cada textura y aroma de tu vino. Bébalo, lentamente, ya que se cultivó en los viñedos y se produjo, con amor y cuidado. Empecemos…
1. Beber vino favorece a una vida longeva
El resveratrol es un polifenol que se encuentra especialmente en los vinos tintos. Es un poderoso antioxidante que se puede encontrar en la piel de la uva y en el jugo de uva roja. Los antioxidantes ayudan al cuerpo a combatir los radicales libres que pueden dañar nuestras células y órganos.
Los estudios muestran que el resveratrol promueve la salud y la longevidad al aumentar la actividad de una proteína llamada sirtuinas. Las sirtuinas son las encargadas de proteger al organismo contra las enfermedades del envejecimiento.
Varios estudios han sugerido que el consumo de alcohol, en particular los vinos, ha mostrado beneficios para la salud que conducen a una mayor esperanza de vida. No obstante, estos estudios enfatizan que los beneficios positivos solo se obtienen con un consumo moderado.
Conclusión clave: si desea proteger su cuerpo contra las enfermedades del envejecimiento, consumir una cantidad moderada de vino brinda beneficios positivos para la salud que pueden prolongar la vida.
2. Beber vino ayuda a mantener nuestro corazón sano
Desde la antigüedad, las enfermedades cardiovasculares (ECV) se han convertido en un problema conocido y potencialmente mortal para el mundo.
Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), hasta el momento, muchas personas siguen muriendo anualmente por ECV que por cualquier otra enfermedad y ha sido la causa número uno de mortalidad y morbilidad en todo el mundo.
Muchos investigadores han demostrado que la ingesta de polifenoles se asocia con un riesgo reducido de ECV. Los vinos contienen polifenoles que se pueden encontrar activamente en los flavonoides que también tienen propiedades antioxidantes putativas.
Una vez más, estos polifenoles se denominan resveratrol y pueden ayudar a proteger el revestimiento de los vasos sanguíneos del corazón. El consumo de 1 a 2 bebidas al día (4 a 8 onzas) puede reducir el riesgo de enfermedades cardiovasculares.
Beber vino puede ayudar a disminuir la lipoproteína de baja densidad (LDL), también conocida como colesterol malo, que puede causar daño arterial al mismo tiempo que aumenta la lipoproteína de alta densidad (HDL) del cuerpo, también conocida como colesterol bueno, que puede reducir el riesgo de enfermedad cardíaca. Además, el vino previene la formación de coágulos sanguíneos.
Conclusión clave: Beber de 4 a 8 onzas de vino por día puede reducir el riesgo de tener enfermedades cardiovasculares debido a los polifenoles que contiene.
3. Los nutrientes del vino pueden prevenir la enfermedad de alzheimer
Las personas que se hacen mayores siempre tienen miedo de perder todos sus preciados recuerdos. Algunos creen que es inevitable, sin embargo, hay cientos de formas en que se puede prevenir. Uno de estos métodos es beber vino.
La demencia es un trastorno crónico o persistente del proceso mental que se produce gradualmente durante la vejez. Los estudios demuestran que el consumo de vino puede reducir el riesgo de padecer demencia, que a menudo conduce a la enfermedad de Alzheimer.
La enfermedad de Alzheimer es un deterioro mental en desarrollo que puede ocurrir con la edad. Una vez más, el resveratrol que se encuentra en los vinos ayuda a mantener abiertos los vasos sanguíneos, de modo que el suministro esencial de oxígeno y glucosa pueda moverse libremente al cerebro para mantenerlo vivo y funcionando.
Conclusión clave: el resveratrol, que se puede encontrar en el vino, mantiene los vasos sanguíneos libres de bloqueos que pueden afectar las funciones cerebrales para retener los recuerdos.
4. Beber vino puede mantener a raya la depresión
La depresión ha sido un trastorno común pero grave para algunas personas porque puede afectar cómo se siente, piensa y maneja las actividades diarias. Esto puede parecer contradictorio, ya que la mayoría de la gente sabe que el consumo de alcohol puede empeorar la depresión o la ansiedad. A pesar de eso, beber una copa de vino a la semana puede convertirse en un buen combatiente ante la depresión.
Un estudio de siete años realizado por PREDIMED analizó a 5.500 individuos de bebedores ligeros a moderados y encontró que los individuos que bebían de dos a siete vasos de vino en una semana eran menos propensos a la depresión que los no bebedores.
Nuevamente, se trata de beber con moderación porque en el mismo estudio, los que bebían bebidas alcohólicas pesadas eran más propensos a la depresión.
Conclusión clave: disfrutar de dos a siete copas de vino en una semana puede ser su remedio para la depresión.
5. Beber vino puede darle una piel más sana
Los altos niveles de antioxidantes en el vino, cuando se aplican directamente sobre la piel, pueden inhibir el crecimiento de las bacterias que causan el acné y son beneficiosos para mantener una piel sana. Los antioxidantes rejuvenecen la piel, aumentan la elasticidad de la misma y mantienen la piel brillante y radiante.
Al consumir vino como bebida, el vino puede estimular la circulación sanguínea, lo que puede prevenir la formación de arrugas y el envejecimiento de la piel. Sin embargo, cuando se bebe en exceso, el flujo hormonal pierde su equilibrio y puede causar deshidratación de la piel y agravar las posibilidades de acné.
Conclusión clave: el vino contiene antioxidantes y polifenoles que son esenciales para mantener la piel sana.
6. Beber vino puede ayudar a prevenir la obesidad
Existe una diferencia entre el sobrepeso y la obesidad. El sobrepeso se refiere a una cantidad excesiva de peso corporal que puede provenir de los músculos, los huesos, la grasa y el agua. La obesidad, por otro lado, se refiere a cantidades excesivas de grasa corporal.
Según datos del Global Health Observatory (GHO), al menos 2,8 millones de personas en el mundo mueren cada año como resultado de sobrepeso u obesidad.
El vino, específicamente el vino blanco, contiene el antioxidante llamado epicatequina, quercetina y resveratrol. Estos antioxidantes pueden reducir los niveles de colesterol y también pueden contribuir a la pérdida de peso al quemar las grasas del vientre y al disminuir la inflamación comúnmente asociada con la obesidad.
Conclusión clave: el vino blanco promueve la pérdida de peso al quemar la grasa del vientre y al disminuir las propiedades antiinflamatorias.
7. Beber vino ayuda a fortalecer las defensas de su cuerpo
El consumo diario de vino puede estimular el sistema inmunológico según los investigadores. El etanol, el componente químico de las bebidas alcohólicas y el vino, también ayuda a aumentar la potencia de las vacunas.
Beber vino con moderación puede ayudar a desarrollar una inmunidad que puede luchar contra 200 virus. El vino contiene altos niveles de antioxidantes en forma de flavonoides que pueden combatir fuertemente los virus.
Como prueba, el vino tinto puede ayudar a curar los síntomas de la gripe y el resfriado. El polifenol resveratrol puede evitar que los virus se multipliquen una vez que han ingresado al sistema del cuerpo.
Conclusión clave: el consumo diario de vino ayuda a estimular el sistema inmunológico, ya que contiene un alto nivel de antioxidantes que luchan contra los virus.
8. Beber vino fortalece los huesos
Investigadores anteriores han asociado el consumo moderado de vino con una mejor densidad ósea. A medida que los humanos envejecen, los huesos se vuelven más delgados y más débiles. Nuevos estudios muestran que beber vino con moderación puede ayudar a reducir el riesgo de tener osteoporosis.
La osteoporosis es una enfermedad de los huesos que es más común en las mujeres después de haber alcanzado la etapa menopáusica. La osteoporosis hace que el hueso se vuelva quebradizo y más frágil con una mayor susceptibilidad a la fractura ósea.
Una o dos copas de vino al día pueden proteger a las mujeres del adelgazamiento de los huesos. Parece que el consumo modesto de vino ayuda con el desequilibrio entre el hueso viejo que se disuelve y la producción deficiente de hueso nuevo que puede conducir a la osteoporosis en las mujeres mayores.
Conclusión clave: la osteoporosis se puede reducir mediante un consumo modesto de vino en mujeres mayores.
9. El vino puede proteger nuestros dientes de la placa dental
El vino puede ayudar a prevenir la caries dental al inhibir el crecimiento de ciertas bacterias que se encuentran en la biopelícula oral según las investigaciones realizadas por la American Chemical Society. El vino puede ralentizar el crecimiento de bacterias que pueden causar caries.
Los polifenoles, el vino y el extracto de semilla de uva pueden ralentizar el crecimiento de bacterias responsables de la formación de placa y caries. Aunque el vino tinto puede ayudar a reducir estas bacterias, la salud bucal óptima sigue siendo el resultado de la higiene dental diaria.
El cepillado, el hilo dental y las visitas regulares al dentista siguen siendo las mejores recomendaciones, pero incluir vino en su dieta puede aumentar sus defensas contra docenas de posibles enfermedades de los dientes y las encías.
Conclusión clave: el vino puede inhibir el crecimiento de bacterias que pueden causar caries. No obstante, una rutina diaria de higiene dental sigue siendo la mejor manera de proteger nuestros dientes de las caries.
10. Beber vino puede ayudar a nuestra vista
El oftalmólogo Milind Pande, de Vision Surgery, dice que el resveratrol que se encuentra en el vino puede ser beneficioso para los ojos. El resveratrol previene el deterioro de los músculos oculares relacionado con la edad. Uno de estos deterioros de los músculos oculares relacionados con la edad se llama degeneración macular.
La degeneración macular es una de las principales causas de pérdida de la visión y se considera una enfermedad ocular incurable. Este es el deterioro de la porción central de la retina, que se llama mácula, que registra las imágenes que vemos.
La mácula es la responsable de su capacidad para leer, reconocer y ver objetos con gran detalle. El resveratrol, que se puede encontrar en el vino y las uvas, previene el crecimiento de vasos sanguíneos en los ojos que pueden conducir a la degeneración macular.
Conclusión clave: el vino puede prevenir el deterioro de los músculos oculares relacionado con la edad. Entonces, diga adiós a las zanahorias y beba su vino para una mejor salud ocular.
Portugal es uno de los países más antiguos de Europa y la mayoría de sus viñedos se remontan a siglos atrás, algunos han sobrevivido y se han desarrollado desde antes de la época romana. El valle del Duero, ubicado en el norte de Portugal, es la región vinícola demarcada más antigua del mundo, particularmente famosa por el vino de Oporto, así como por varios otros tintos de fama mundial. No es de extrañar, entonces, que en Portugal la vinificación, los viñedos y las bodegas sean una parte subyacente de la fuerte cultura e identidad del país. Compruébalo por ti mismo y disfruta de un país de moda lleno de tradiciones y sabores.