¿Por qué decir no nos cuesta tanto? Es una palabra corta, sencilla, pero nos es imposible de pronunciar en muchas ocasiones.
El decir no es algo que nos da culpa, y nos hace sentir malos e insensibles. Y ¿porque? Si no te apetece ir a esa fiesta, cuidar el perro de tu amigo, o ir de vacaciones con alguien que no soportas. ¿Por qué no puedes pronunciar ese bendito monosílabo que tantos problemas te evitaría?
En este posteo te explicaremos porque el aprender decir no en ocasiones, es bueno para ti y refuerza tu autoestima. Así que comienza a practicar tu ¡NOOOOO!.
Aprender a Decir NO
El "aprender a decir No" no tiene que ser algo negativo
Tienes que cambiar ese viejo concepto que está instalado en tu cabeza. El decir no no necesariamente implica algo negativo. No significa que estamos disgustados con la otra persona, sino simplemente que a ti no te apetece hacer determinada cosa o ir a determinado lugar.
No se puede esperar siempre una respuesta positiva de la otra persona, debemos acostumbrarnos y acostumbrar a los demás que cada uno tiene sus tiempos. Y no debemos enojarnos, ni tampoco se deben enojar con nosotros si damos una respuesta negativa.
Cuando digas No da tus argumentos
Es muy constructivo explicar a la otra persona porque dices no. Debes ser sincero, explicar cuáles son tus razones. Si lo haces de esa manera el decir no será racional y fundamentado, por lo que no te sentirás mal al hacerlo, sino todo lo contrario.
No te muestres siempre tan accesible
Hay personas que por su predisposición son el blanco de los pedidos de favores. No es que les sobre el tiempo, sino que tienen muy buena predisposición y harán lo imposible para cumplir con lo que te comprometieron.
Eso deben entenderlo las demás personas. Si te apetece y te hace sentir bien tomar un determinado compromiso hazlo, pero siempre debes poner de manifiesto que tú también tienes tus obligaciones, y que te haces un lugar para cumplir.
De esa manera tu tiempo será valorado, no sólo por los demás sino también por ti mismo.
Si tienes dudas no digas si
Si ante determinada situación tienes dudas sobre qué contestar, no digas si, tampoco debes decir no. en esos casos demora tu respuesta, piénsatelo muy bien, evalúa los pros y los contras. Y una vez que lo hayas hecho, y estés seguro responde por lo que creas mejor.
El aprender a decir no, y saber cómo y cuándo decirlo aumentará tu autoestima. Trabaja en ello, no olvides que hoy es el mejor día para comenzar.
Esperamos que este posteo te haya sido de utilidad, muchas gracias por leernos