Amor-odio... y dermatomas

Tengo que admitir que no soy imparcial: siempre he odiado el mapa de los dermatomas. Cuando estudiaba fisioterapia, simplemente nos dijeron que teníamos que memorizarlos. Sin preguntas (¡claro, estoy hablando de hace más de una década!). ¡Ni siquiera sabía que no solo existían varias versiones de estos mapas, sino que también contenían información contradictoria! Recuerdo que eran como una pintura sagrada. Se suponía que simplemente teníamos que admirar los mapas de dermatomas (en las 3 posiciones), los aprendimos de memoria y no hicimos preguntas. “Esto es Fisioterapia básica”, me dijeron. Se convirtieron en mi pesadilla.

Memorizando dermatomas

Recuerdo haber probado técnicas ridículas para memorizarlos. No tenían sentido, no tenían lógica para mí. De alguna manera, logré aprobar mis exámenes … y me prometí a mí misma que pegaría estos mapas corporales “tan importantes” en una pared tan pronto como consiguiera un trabajo … Me hicieron sentir que sin este conocimiento, las esperanzas de una carrera de fisioterapia de éxito en la evaluación y el tratamiento serían casi nulas.

Así que lo hice. Comencé mi carrera y esos mapas corporales me siguieron a todas partes y, sin embargo, no podía usarlos ya que la mayoría de mis pacientes no presentaban un patrón de dolor que cuadrase con ellos. Y en lugar de cuestionar los mapas del cuerpo, me cuestionaba a mí misma y a mis habilidades. Claramente, esos mapas han existido durante años y todos los conocen.

Relación odio-miedo

Pasaron los años y desarrollé una relación odio-miedo al dolor de tipo radicular, culpándome a mí misma por “mi incapacidad” para usar y memorizar los mapas de dermatomas. Incluso durante mi máster, me ridiculizaron durante una de las prácticas clínicas, porque no me sabía los mapas de memoria (después de eso, consideré abrir un bar de zumos). Esta profesora en particular tenía un brillante currículum, habiendo estudiado (consiguiendo notas “top”) con algunos de los mejores fisioterapeutas del mundo en Australia. Yo la admiraba y quería que ella fuera mi modelo a seguir y mi inspiración profesional… Así que esto fue como una patada en la entrepierna (metafóricamente hablando, por supuesto).

Afortunadamente, han pasado más años y me he vuelto (definitivamente) más vieja, (mucho más) crítica y (un poquito, muy poquito) más sabia. ¡Me olvidé de los mapas y finalmente me sentí libre! Seguí adelante, me olvidé de ellos y continué mi carrera tratando todo tipo de dolor sin los mapas de los c…s. Mis habilidades en razonamiento clínico y yo. La vida de fisio era tranquila.

Vuelta a los dermatomas

Recientemente, perdí mi “cordura” y me metí en investigación, donde estoy (curiosamente) desarrollando mapas del cuerpo a partir del dolor referido espinal. ¿A que no esperabas esto, eh? (¡yo tampoco!) ¡Mi investigación estudia dibujos de dolor digital provenientes de dolor de tipo radicular de pacientes reales! Genial, ¿verdad? En mi búsqueda bibliográfica, me encontré con un artículo que me llevó de vuelta a la “relación tóxica” y mi (casi) bar de zumos. Este artículo confirmó mis sospechas: el mapa de dermatomas no es tan valioso como me lo vendieron cuando era estudiante universitario (¡síííí, lo sabía!).

Downs y Laporte (2011) publicaron un artículo sobre la información contradictoria de los mapas de dermatomas y su uso en entornos clínicos y educativos. ¡Merece la pena leerlo!

Puedes acceder a este artículo de forma gratuita aquí.

Este artículo destaca diferentes hechos:



Hay diferentes mapas utilizados en entornos educativos y clínicos.

Estos mapas tienen similitudes y diferencias y pueden ser tan antiguos como ser del 1950.

Cada mapa se desarrolló utilizando una metodología diferente … algunos son “mejores” que otros

Según los estándares actuales de investigación … algunos de ellos no deberían de haber sido publicados, ¡pero aún sobreviven!

Después de leer este artículo, me acordé de la profesora de fisio que estuvo cerca de hacer que dejara la profesión para abrir un bar de zumos. Esto va para ti: “Miss Perfecta, vete a la…”.

Conclusión

En conclusión, se necesita más y mejor investigación para avanzar y completar el “vacío” dejado por los mapas de dermatomas (o puede que deseéis esperar hasta que yo termine;)) cuando el uso de nuevas tecnologías podría ayudar a crear mapas clínicamente más relevantes. Sin embargo, esto también sacude la base de multitud de “conocimientos básicos” que la Fisioterapia mantiene. Chicos, realmente necesitamos ser más críticos y no solo asumir que algo es verdadero o válido, simplemente porque ha existido durante años o ” a mí me funciona” (“deshacerse” de las Miss Perfectas del mundo sería útil también).

PS: Miss Perfecta: I forgive you.

(Nota del autor: El nombre de Miss Perfecta se ha cambiado por temas de confidencialidad. Sin embargo, sus palabras, sus acciones y cómo me hizo sentir, son muy reales.

Fuente: este post proviene de La Fisioterapia.net, donde puedes consultar el contenido original.
¿Vulnera este post tus derechos? Pincha aquí.
Creado:
¿Qué te ha parecido esta idea?
Esta información nunca debe sustituir a la opinión de un médico. Ante cualquier duda, consulta con profesionales.

Esta idea proviene de:

Y estas son sus últimas ideas publicadas:

¿Qué es la marcha? La marcha es una característica más de las actividades humanas y, como tal, está profundamente influenciada por estas. El contexto social, laboral, cultural o deportivo en el que se ...

El síndrome del túnel carpiano es el síndrome de atrapamiento nervioso más conocido y estudiado actualmente, siendo la afectación no traumática de la mano más frecuente. Presenta datos de prevalencia ...

Recomendamos