Diseña tu menú: qué vas a desayunar, comer y cenar. Esto evitará las compras de pánico y que todo se eche a perder en tu refrigerador. Además de ahorrarte tiempo y dinero.
Haz una lista de lo que necesitas en el supermercado después de haber comido y mantenla a la mano. Si compras sin lista y peor aún si no has comido, es muy probable que incluyas compras poco sanas, o que tomes improvisadamente cosas que realmente no necesitas.
Dosifica tus porciones y cuida tus golosinas: si vives con más personas, con amigos, o tienes hijos, dosifica tus porciones y cuida la cantidad de ingesta de azúcar para que no termines comiéndote sus golosinas primero.
Muévete: estar en casa 24 horas del día hace que seamos todavía más sedentarios. Es por esta razón que es importante que dediques al menos 30 minutos al día a moverte.
Haz tu rutina: procura despertar y dormir con los mismos horarios todos los días. Esto ayuda a que tus hormonas de hambre, saciedad y estrés no se desestabilicen. Sabemos que estar en casa, durante la cuarentena, puede hacerte perder la noción del tiempo, por eso es importante cuidar tus horarios de desayuno, comida y cena. Sepáralos 100% del home office.
No te olvides de las verduras y frutas: disfrútalas a diario. Idealmente debes comer de 3 a 5 distintas para asegurar diversidad de vitaminas y minerales. Esto ayuda a que tu sistema inmune sea más fuerte, mejora tu digestión y eleva tus niveles de saciedad. Asimismo, evita que comas de más.
No olvides dejarme tus dudas o comentarios, y ponerlos en prácticas para coemnzar a crear hábitos saludables. Para asesorías, sígueme en mi instagram.