Los antibióticos son compuestos químicos que eliminan y/o inhiben el crecimiento de los microorganismos que dañan nuestra salud y causan enfermedades, un descubrimiento que cambió el mundo el mundo de la medicina y hoy día nos ayuda a combatir todo tipo de afecciones y trastornos.
A pesar de sus grandes cualidades, son muchos los antibióticos que pueden producirnos alergias y provocar efectos secundarios adversos sobre nuestra salud. Además, el consumo abusivo de este tipo de sustancias es la causa por la cual cada vez tenemos que recurrir a antibiótiticos más potentes para paliar las enfermedades, ya que con el paso del tiempo, nuestro cuerpo se va haciendo resistente a la acción de éstos.
En la naturaleza existen, por suerte, numerosos antibióticos naturales cuya acción puede llegar a ser igual de efectiva que los químicos, pero con la gran ventaja de carecer de efectos secundarios, convirtiéndose en la opción perfecta para aquellas personas que quieran tratar alguna dolencia de una forma efectiva y natural.
Estos antibióticos naturales son, en la mayoría de los casos, alimentos cotidianos que ingerimos día a día, y que combinados entre sí, pueden ayudarnos tanto a reforzar nuestras defensas como a combatir enfermedades y trastornos específicos. No pierdas detalle de la siguiente lista:
Mejorar la salud con antibióticos naturales
Ajo
Como ya hemos mencionado en otros artículos, el ajo es uno de los más potentes antibióticos naturales que existen, con grandes propiedades antibactericidas y antivirales que no sólo nos ayuda a curar, sino también a prevenir la aparición de todo tipo de enfermedades e infecciones.
Para subir nuestras defensas y gozar de buena salud basta con comer un diente de ajo crudo al día, ya sea entero o untado en una deliciosa tostada con aceite de oliva. Por otro lado, si lo que necesitamos es desinfectar una herida, lo aplicaremos directamente sobre ella y listo.
Cebolla
Es junto al ajo, uno de los más importantes y efectivos antibióticos naturales que existen. Destaca su capacidad para combatir parásitos intestinales, limpiar el colon, aliviar el dolor de muelas y tratar todo tipo de infecciones de las vías respiratorias, como el asma o la bronquitis.
Jengibre
Junto con su gran poder antibiótico, lo más destacable del jengibre es su gran capacidad para combatir los microorganismos y bacterias nocivos y fomentar el crecimiento de los positivos para nuestra salud, como los que forman parte de nuestra flora intestinal. Combinado con el ajo, obtenemos un potente remedio para prevenir el cáncer.
Es perfecto para tratar el colon irritable, calmar los dolores menstruales, bajar la fiebre o combatir el dolor de cabeza, siendo la infusión la forma más común de tomarlo (hervir un puñado de jengibre rayado en agua, colar y tomar).
Romero
Además de un rico aderezo para nuestros platos, el romero es una planta con excelentes propiedades antibacterianas y antiinflamatorias, siendo muy útil para combatir los piojos, reducir la celulitis o tratar las agujetas y el dolor muscular.
Una infusión de romero diaria nos ayudará a mantener lejos de nuestro organismo todo tipo de enfermedades e infecciones.
Tila
La tila es conocida por ser el relajante natural más popular que existe, sin embargo, más allá de su función calmante para los nervios, posee extraordinarias propiedades antivirales que nos ayudan a reforzar nuestra salud y combatir infecciones.
La forma más sencilla de beneficiarnos de sus propiedades es elaborando una infusión: hervimos un puñado de hojas de tila en agua, dejamos reposar, colamos y nos la tomamos.
Alimentos con grandes propiedades para reforzar nuestra salud y mantener alejada las enfermedades. ¿Los compartimos?
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