La fisiología respiratoria ayuda a mejorar la respuesta del organismo a los primeros síntomas que se presentan cuando dejamos de fumar. Utiliza técnicas de aclaramiento bronquial para ayudar a nuestro cuerpo a acostumbrarse a la nueva situación. El aclaramiento bronquial comienza a producirse a partir del tercer o cuarto día de fumar el último cigarrillo. Los cilios del árbol bronquial empiezan a tener mayor movilidad y así la higiene de los bronquios comienza a manifestarse. Los fumadores suelen asociar equivocadamente el aumento de secreciones y tos con un empeoramiento de la salud, pero la realidad es totalmente opuesta. El sistema respiratorio está empezando a funcionar mejor, pero viene depurándose de las prácticas fumadoras.
Además de la fisioterapia respiratoria, otra ventaja del trabajo de los fisioterapeutas para dejar de fumar es mantener el organismo físicamente activo. Los estudios reflejan que una actividad física moderada entre 5 y 30 minutos ayuda a reducir las ansias más fuertes de fumar un cigarrillo. La práctica durante al menos 3 días a la semana de actividad física por 30 minutos también es beneficiosa para combatir efectos adversos de dejar el cigarrillo, como son: la pérdida de concentración y el aumento de peso.
Las preguntas que ayudan a reunir la fuerza de voluntad indispensable para dejar de fumar, y también para enfocar mejor nuestro proceso. Las preguntas principales que tenemos que respondernos son:
¿Qué riesgos nos trae fumar?
¿Por qué motivo queremos abandonar el cigarrillo?
¿Cuántos cigarrillos al día fumas?
¿En qué momentos del día fumas más?
¿Qué obstáculos hay que superar para dejar de fumar?
La respuesta a estas preguntas servirá para darle una perspectiva a nuestro esfuerzo y detectar posibles problemas que surjan cuando decidamos dejar el tabaco. Por ejemplo, si el momento en que más fumamos es el descanso en el trabajo, podemos utilizar esos minutos para salir a dar una vuelta y comer una fruta. Eso reducirá las posibilidades de recaer en el vicio de fumar.
Otro consejo importante para ayudar en nuestra iniciativa de dejar el cigarrillo, es encontrar gente que haya dejado de fumar en la zona. Hacer ejercicio en conjunto y hablar de los problemas que surgen es una forma de encontrar nuevos caminos para hacerle frente a las complicaciones que pueden aparecer.
Los expertos remarcan que la primera semana es la más importante, ya que los primeros siete días después de dejar el cigarrillo presentan mayores síntomas y complicaciones. El 75% de las personas que vuelve a fumar, lo hace en esa primera semana. Recuerda que el acompañamiento de un experto fisioterapeuta nos puede ayudar a enfrentar y sortear los problemas que terminan ocasionando un regreso al vicio de fumar.
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