Desde hace algunos años los cosméticos naturales han sido protagonistas de un gran auge, gracias a la tendencia ecológica. El ser humano se ha vuelto cada vez más consciente del impacto que genera la elección de productos de origen químico. El hombre no solo desea conservar el medio ambiente, sino que también quiere utilizar productos que no tengan efectos adversos hacia su propia salud.
La industria cosmética no escapa de esta realidad, y las empresas se esfuerzan para no agredir el medio ambiente y para garantizar que los productos sean realmente efectivos a un coste razonable.
Así, los cosméticos naturales son, bajo todo punto de vista, y como veremos a continuación, productos que ofrecen únicamente ventajas.
- Son productos que poseen afinidad con nuestra piel.
Dado que para su elaboración se emplean exclusivamente elementos naturales y no sintéticos, se obtiene como resultado un balance perfecto entre la composición bioquímica de nuestra piel y el cosmético. Por lo tanto, la piel se vuelve brillante y elástica.
- Potencian las funciones dérmicas de nuestra piel.
Los componentes de estos cosméticos, al ser naturales, aportan elementos que la epidermis necesita para contrarrestar los efectos del envejecimiento, la contaminación y la genética. Al introducir elementos naturales en nuestra piel se estará regenerando con nutrientes similares a la composición de nuestras células, por ello el envejecimiento se retrasa y el sistema inmunológico se fortalece.
- Ayudan a conservar el medio ambiente.
Cuando se fabrican cosméticos de este tipo, se producen desechos que no son tóxicos, y por lo tanto, no contaminan. Esto se debe a la sencilla razón de que está prohibido usar derivados de la industria petroquímica para elaborar estos productos.
- Contribuye con la eliminación del maltrato animal.
Estos productos no se prueban en animales, de manera que las empresas que los elaboran no amenazan a seres indefensos que son víctimas de crueldad en los laboratorios.
- No contienen perfumes artificiales, ni conservantes químicos, ni colorantes de síntesis que producen alergias a gran parte de la población.
- Promueven los cultivos ecológicos.
Para producir cosméticos naturales es preciso que sus componentes sean 100 % orgánicos. De esta forma los agricultores ecológicos se ven beneficiados y se descartan las plantas genéticamente modificadas.
- Los contenedores y embalajes son eco-responsables.
Por norma, las cajas, recipientes y otros materiales que sirven para envolver el producto deben ser elaborados con elementos biodegradables, reciclables o reutilizables.