En este post queremos darte algunas pautas para que puedas hacer algunos ejercicios en casa o en el gimnasio. Si tienes las rodillas sensibles, olvídate de las sentadillas. Aquí te proponemos otras opciones.
El puente
Para realizar este ejercicio es preferible usar una esterilla o una toalla. Túmbate boca arriba y levanta los glúteos y las caderas. Las piernas deben estar abiertas y dobladas unos 90 grados. El ejercicio consiste en subir el culo, haciendo presión en los glúteos y los abdominales, aguantar unos cinco segundos y bajar. Puedes hacer 15 repeticiones de este ejercicio.
Levantar talones
Esta vez debes tumbarte boca abajo. Debes doblar tus codos hacia fuera y poner tus palmas boca abajo en el suelo. A continuación, dobla tus rodillas y ábrelas, de forma que tus talones se toquen. Ahora, debes hacer presión en los talones y elevarlos hacia el techo, lo más alto que puedas. Bájalos y repite este ejercicio 20 veces.
Planchas laterales
Para este ejercicio túmbate sobre tu lado derecho y dobla tu pierna hacia dentro y apóyate sobre tu codo. Ahora, estira la pierna izquierda y sitúa tu mano izquierda detrás de tu cabeza. Consiste en ir levantando la pierna izquierda justo por encima de la cadera, aguantar unos segundos y bajar. Puedes repetir este ejercicio 20 veces con cada pierna.
Triángulo
En esta ocasión, debes ponerte boca abajo y apoyar tus antebrazos. Ahora, dobla una de tus piernas y apóyate sobre ella, la otra debes estirarla hacia arriba con el pie en punta. Imagina que debes dibujar un triángulo con tu cuerpo: debes estirar tu pierna hacia fuera, subir hacia el techo y moverla de nuevo hacia el centro. Puedes hacer diez repeticiones de este ejercicio con cada pierna.
Estos son solo algunos de los ejercicios que te recomendamos. Sin embargo, existen deportes que son perfectos para personas que deben fortalecer sus rodillas. La bicicleta es tu mejor aliada. Aunque te pueda parecer que estás cargando la rodilla, en realidad, estás fortaleciendo los músculos que la rodean. Así, si todavía no te has animado a subirte a las dos ruedas, ¡anímate!
Además, la natación también es un deporte perfecto para las personas que sufren lesiones. Se trata de un deporte que nos ayuda a fortalecer nuestros músculos sin suponer una carga para ellos. Por eso, si quieres fortalecer tus piernas sin que tus rodillas sufran, no lo pienses dos veces y lánzate a la piscina.
¿Has probado nuestros ejercicios? ¿Qué te han parecido?