Los primeros síntomas del herpes labial son sensibilidad, hormigueo y una sensación de ardor antes de que la úlcera aparezca. Una vez aparece, lo hace como una ampolla que se va transformando en costra. Su duración suele ser de unos 15 días y son dos semanas de molestias, dolor y de ir por la vida con una boca muy antiestética.
A parte de fármacos antivirales como el aciclovir, podemos recurrir a remedios naturales para deshacernos de esas calenturas. Uno de ellos fácil y eficaz nos lo proporciona el bicarbonato.
Las propiedades antibacterianas y antisépticas del bicarbonato son eficaces para eliminar las bacterias y en consecuencia las llagas, úlceras y comezones producidas por eczemas, picaduras, hongos e incluso las del herpes labial y de la varicela. Su capacidad de absorber la humedad y las toxinas de las portuberancias o picaduras, alivia la picazón y la inflamación promoviendo una rápida curación. Al mismo tiempo limpia la piel y la exfolia deshaciéndose de las impurezas y dejando la piel limpia, desinfectada y suave.
Ingredientes:
Bicarbonato de sodio
Agua mineral o zumo de limón.
Elaboración y aplicación:
Hacer una pasta mezclando ambos ingredientes.
Aplicar sobre la llaga de manera que quede cubierta por completo tres veces al día.
Aplicar con la ayuda de un bastoncillo de algodón, si lo hacemos con las manos lavarlas bien con agua y jabón antes y después de la aplicación.
Dejar secar, retirar con agua y secar suavemente con una toalla.
No dejar la toalla al alcance de otras personas para evitar contagios.
Empezar a aplicar ante el primer síntoma de sensibilidad, hormigueo o ardor para evitar la aparición de la llaga. Una vez ha aparecido la llaga, nos ayudará a favorecer la curación y a aliviar los molestos síntomas.
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