El objetivo de las vitaminas y los minerales es permitir que el organismo funcione correctamente, estimulando el funcionamiento del sistema inmunológico y favoreciendo el crecimiento y desarrollo normal de las células para que desempeñen todas sus funciones.
Las solubles en grasas o liposolubles: entre éstas se encuentran las vitaminas A, D, E y K; las cuales al disolverse se pueden almacenar en el organismo.
Las solubles en agua o hidrosolubles: está la vitamina C y del complejo B como B6, B12, la niacina, el ácido fólico y la riboflavina; que deben disolverse previamente en agua, para que el organismo las absorba. Es por ello, que no se deben almacenar. Generalmente, parte de las vitaminas B o C que el organismo no utilice, será expulsado por medio de la orina.
Es importante mencionar, que las vitaminas son sustancias de origen animal o vegetal. Sin embargo, los minerales son inorgánicos que proceden de la tierra o el agua.
Sabemos que nuestro cuerpo necesita de importantes cantidades de diversos minerales, como por ejemplo el calcio, el cromo, cobre, yodo, zinc, hierro y selenio, entre otros. Estos son denominados minerales oligoelementos o traza, porque solo se requiere de una pequeña porción de ellos diariamente.
¿Qué vitaminas necesita tu cuerpo?
La vitamina A: la encuentras en las verduras de color verde y amarillo, como por ejemplo los pimientos, espinacas, brócoli y albaricoque. También en frutas como el melón. El organismo aprovecha al máximo todas sus propiedades y ayuda considerablemente en el crecimiento celular, observándose una mejor presentación en los dientes, cabellos y huesos.
La vitamina B1: al entrar en el grupo de las vitaminas B, es la destacada por mantener los niveles de energía del cuerpo en el porcentaje más alto, siendo vital para mantener la mente activa y productiva. Sin dejar de lado al sistema nervioso, que también se beneficia. Entre los alimentos en los que podemos percibirlos esta la carne de cerdo, salmón y avena.
La vitamina C: es una de las más famosas dentro del grupo de vitaminas y asociadas rápidamente a los cítricos. Sin embargo, al comer brócoli, cítricos, pimentón, fresas, papaya, coles de Bruselas o nopales, estarás consumiendo vitamina C. Te ayudará a fortalecer el sistema inmunológico, haciendo que no recaigas tan rápido en enfermedades.
La vitamina D: es conocida también como vitamina del sol, porque se activa cuando expones tu piel a los rayos solares, protegiendo a tu organismo de padecer enfermedades como la osteomalacia o el raquitismo. Asimismo, esta vitamina es idónea para procesar minerales como el calcio y fosfato. La puedes obtener consumiendo pescado, en especial el atún.
La vitamina E: los que poseen mayor cantidad de esta vitamina son los vegetales de hoja verde, su función es proteger de forma activa la utilidad en el organismo de las vitaminas A y C.
Vitamina K: la sangre de tu cuerpo podrá estar siempre saludable y libre de desechos si te preocupas por consumir verduras y acelgas. Además, regula ciertas proteínas desechando las poco benéficas. Es importante mencionar que tu sangrado no será óptimo, si no existe una correcta coagulación de tu sistema circulatorio.
En esta infografía podemos ver que vitaminas son necesarias para cada parte del cuerpo y cuales son los alimentos que las contienen.
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