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La fisioterapeuta, Laura Flores, de la clínica Fisioterapia Athenea, nos explica qué tratamientos se pueden aplicar a los puntos gatillo. Habla especialmente de la punción seca. Mira el vídeo y lee la entrevista, contiene información adicional.
Los puntos gatillo (PG) pueden tratarse mediante:
Técnicas manuales: estiramientos, masoterapia (masajes) y técnicas de compresión.
Técnicas instrumentales: Electroterapia (ondas de choque, ultrasonido, láser) y Terapia invasiva (punción seca, electroacupuntura e infiltración).
¿Qué es la punción seca?
La punción seca recibe este nombre porque no se introduce ningún medicamento ni se extrae nada de nuestro cuerpo.
Implica la utilización de las agujas para generar un estímulo mecánico que sirva para tratar estos puntos gatillo.
Existen dos tipos de punción seca:
la superficial
la profunda: más dolorosa que la primera, se cree que es más efectiva
Se utiliza una u otra en función del paciente y de la patología.
¿Es lo mismo que la Acupuntura?
No, es completamente diferente.
La punción seca implica introducir una aguja en el nódulo, en el foco de irritabilidad.
La acupuntura, por su parte, se basa en la idea de que el cuerpo está atravesado por una serie de meridianos. Cuando hay un problema es porque se ha producido un bloqueo de energía en algún punto de un meridiano y será ese punto el que tratarán.
¿Cuántas sesiones son necesarias para tratarse con punción seca?
No es algo esquemático saber en cuántas sesiones nos podemos recuperar de un dolor producido por un punto gatillo.
Normalmente, cuando hacemos punción superficial se hace durante 3 días a la semana y punción profunda de 1 a 2 veces a la semana. Eso se va alargando en el tiempo según el paciente vaya mejorando de sus síntomas. A su vez, se utiliza una u otra según las características del paciente y de su patología.
¿Quién puede realizar la punción seca?
El único que está autorizado legalmente para utilizarla es el fisioterapeuta, según la resolución 05/2011 del Consejo General de Colegios de Fisioterapeutas de España (CGFE).
Así mismo, sólo podrán recibir esta formación quienes acrediten ser fisioterapeutas.
¿Cuáles son sus contraindicaciones?
Las contraindicaciones son relativas, dependen de cada persona:
Miedo a las agujas
Niños, aunque los que son deportistas quieren recuperarse como sea
Problemas de coagulación
Inmunodeprimidos
Embarazadas, sobre todo en el primer trimestre
Hipotiroidismo
Linfedenectomizados, no se puede pinchar en la zona del linfedema (brazo o pierna)
Peligros posibles:
Neumotórax (pinchazo dentro del pulmón que haga salir el aire)
Lesión nerviosa o irritación de los nervios
Síndrome vasovagal (desmayo), se evita pinchando en posición tumbada.
Hemorragia
Infección del fisioterapeuta
Mioedema (inflamación en zona del pinchazo que suele desaparecer luego de 24 horas)
Complicaciones:
Dermatitis de contacto
Dolor postpunción
Espasmo muscular, se busca este espasmo porque se cree que es lo que beneficioso para el tratamiento
¿Hay algún estudio que respalde su uso, efectividad y seguridad en el paciente?
Varios autores respaldan esta técnica.
Entrevista realizada por Lic. Rosalie Orens.
Agradecemos la colaboración de:
Laura Flores.
Fisioterapeuta y monitora de Pilates.
Fisioterapia Athenea.
Talavera de la Reina.
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