Cuando eres un adulto mayor es inevitable padecer cierta sarcopenia, algo que se agudiza con la vida sedentaria y malos hábitos alimentarios, por ello es importante mantenerlo bajo control.
Este síndrome hace que pierdas gradualmente y luego de manera generalizada tu masa muscular esquelética y tu fuerza. Cuando esto sucede toma gran importancia el entrenamiento de fuerza en personas mayores.
La Sarcopenia puede afectar tanto la salud que incluso trae riesgos para la persona. Puede presentar discapacidad física, una deficiente calidad de vida y en algunos casos, la muerte.
La enfermedad puede aparecer por el normal proceso de envejecimiento o por una alimentación inadecuada o por una vida sedentaria. Incluso también por los tratamientos con determinados medicamentos y por enfermedades crónicas.
Se manifiesta con un fuerte deterioro del estado de salud afectando la movilidad, la capacidad de realizar de manera independiente las actividades cotidianas e incrementa el riesgo de caídas y fracturas.
El entrenamiento de fuerza en personas mayores
El entrenamiento de fuerza es actualmente uno de los métodos más eficaces para combatir este síndrome, a través de una rutina de ejercicios destinada a la estimulación de la hipertrofia e incremento de la fuerza.
La hipertrofia es el crecimiento o aumento del tamaño de las fibras musculares para que el músculo pueda crecer.
El entrenamiento con pesas es ideal para fortalecer las capacidades cognitivas y volitivas (capacidad de una persona para controlar sus actos). También para lograr la contracción muscular e incrementar el tamaño de los músculos.
Existen variedades de ejercicios de fuerza que deben adaptarse a las condiciones del adulto mayor. Se deben ajustar el número de repeticiones por serie y el número de series y descansos entre series.
En general, todos los programas de entrenamiento favorecen ciertas mejoras de la fuerza máxima y de la potencia muscular. Sin embargo, es necesario valorar muy bien a la persona para determinar el tipo y cantidad de ejercicio a realizar.
De ahí la importancia de ponerse en manos de un entrenador personal especializado que disponga de la formación adecuada para tratar a personas mayores.
Debemos concienciar a nuestros mayores de la imporancia de continuar ejercitándose, y ya no hablamos solo de caminar, eso ya no es suficiente, es necesario hacerles ver que sus músculos necesitan estimularse para que tengan una buena calidad de vida y puedan seguir disfrutándola con salud.
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