La piel del cuerpo así como la del rostro necesita cuidados especiales para permitirle tener un aspecto saludable por más tiempo, bien sea con tratamientos mínimamente invasivos o con recursos naturales, es recomendable aplicar tratamientos que nos permitan liberar toxinas. En este post os explicamos todo lo que la exfoliación corporal puede hacer por nosotros y cuáles son los métodos para conseguir una piel más tensa y rejuvenecida.
¿Qué hace la exfoliación por nuestra piel?
Además de los beneficios nombrados al comienzo, la exfoliación es un mecanismo ideal para:
Lucir una piel tonificada debido a la eliminación de toxinas
Mantener la piel libre de impurezas.
Retrasar el envejecimiento de la piel porque se hace una limpieza profunda de los poros.
Mantener la piel hidratada.
Es cierto que abusar de la exfoliación puede causar algunos inconvenientes como, por ejemplo, el retraso en la producción del colágeno y el sebo que protege nuestra piel de los agentes contaminantes del ambiente. Sin embargo, una justa cantidad de veces por mes puede ayudar a mejorar la circulación de nuestro organismo debido a que aporta valor a nuestro sistema linfático de la misma forma como lo hace el drenaje linfático.
7 Consideraciones para hacerse exfoliación corporal
La exfoliación corporal se trata básicamente de usar lo mismo que solemos usar para limpiar el rostro. Sin embargo, como la piel del resto del cuerpo suele ser más resistente, menos delicada y más tensa se recomienda usar ingredientes más duros como los granos de azúcar, por ejemplo.
Cuando usas azúcar en una mezcla de clara de huevo y limón, ésta no se disuelve totalmente, lo que produce una limpieza más profunda sobre nuestra piel.
A la hora de aplicar los exfoliantes en la piel, procuraremos humedecer un poco todo el cuerpo para no dañarlo. Por ejemplo, podemos mezclar el ingrediente de exfoliación que prefiramos con un poco de aceite de coco o de almendras y así es mucho más sencillo deslizar los dedos.
Es importante que después de exfoliar el cuerpo (sobre todo el rostro) usemos protector solar antes de salir de casa. Recordad que la exfoliación libera la piel de impurezas dejando una piel libre y más sensible, y esto facilita el paso de los rayos solares. Si tenéis pensado ir a algún lugar de verano, es preferible que dejéis la exfoliación para después de la visita a la playa, piscina, etc. No es recomendable combinar nunca exfoliación con sol.
Para garantizar que la exfoliación corporal nos de los mejores resultados, deberemos aplicarlo masajeando la zona a tratar. No basta con aplicar las sustancias, el verdadero efecto sobre este tipo de tratamiento se ve luego del masaje.
Si padecéis acné, dermatitis o algún tipo de eczema, no hay que insistir mucho con el masaje, esto puede empeorar el problema. En estos casos es aconsejable limpiar la piel previamente mediante el peeling corporal. Y deberiáis asistir a la consulta con un especialista y que sea él, el que indique cuál es la mejor opción para vuestro caso y tipo de piel.
El masaje durante la exfoliación puede producir irritaciones, por lo que si tenéis una piel seca, es recomendable hidratarla después de la sesión en la ducha. Por ejemplo, con la piel húmeda podéis aplicaros un poco de aceite de coco (nuevamente) o si lo preferís podéis cortar un poco de sábila (aloe vera) licuarla y aplicarla en las zonas donde hicisteis la exfoliación corporal. En el momento de aplicarla, masajead la zona hasta que el gel de la sábila haya absorbido totalmente, veréis que la piel os quedará como sedosa.
Exfoliantes naturales para el cuerpo
Hacerse este tipo de tratamientos desde una estética es una gran opción para las que prefieran sentirse cuidadas y mimadas, pero si preferís hacerlo desde la intimidad de vuestro hogar podéis probar con algunos de estos ingredientes naturales:
Arcilla verde
Por su suavidad es perfecta para las pieles sensibles o que tienen algún tipo de problema en la dermis. Tiene grandes beneficios para la piel como, por ejemplo:
Es antiséptica.
Antiinflamatoria.
Facilita el trabajo de nuestro sistema linfático.
Regenera los tejidos
Para la exfoliación corporal en pieles sensibles es mejor mezclarla con aceites (oliva, almendra, coco) a fin de facilitar el paso de la arcilla por la piel. Dejar reposar por varios minutos y luego retirarla.
Posteriormente usaremos nuestra crema preferida antes de dormir para facilitar la absorción de las propiedades durante las horas de sueño.
Café
Si tenéis una piel más fuerte y con cero problemas en la dermis, podéis probar con algo más fuerte como el café, que mezclado con algún aceite os permite conseguir una piel hermosa en minutos. Posterior a la exfoliación con el café, podéis hidratar vuestra piel con agua de avena.
Sal marina
La sal marina es gruesa y por tanto favorece el trabajo del masaje en la exfoliación corporal. Podéis mezclarla con miel. Masajearemos suavemente varios minutos, lo limpiamos y luego hidratamos la piel con alguna crema bien hidratante.
Para finalizar quisiéramos recordaros que aunque tengáis una piel sana o con complicaciones clínicas, no os excedáis en el uso de la exfoliación corporal porque lejos de ayudar, solo complicaréis las cosas y tendréis una piel enferma y poco saludable. Una vez por semana es lo más recomedable, y si tenéis algún problema en la piel, consultad a vuestro especialista para atacar el problema de raíz.
Escrito por: Estética y Cosmiatría