Personas tóxicas envidiosas
Las personas tóxicas envidiosas son aquellas que no comparten la alegría y la felicidad ante los éxitos del otro. Es normal que con personas de este tipo no quieras tocar determinados temas de conversación o mostrar tu alegría. Muchas veces las personas tóxicas envidiosas son amigos o familiares de hace mucho tiempo, y como no terminamos de entender su característica envidiosa, no cortamos relación pero sabemos que no se alegran genuinamente por nuestros éxitos. Las personas tóxicas envidiosas no tienen empatía, y disfrazan su envidia con ironía y bromas con doble sentido.
Personas tóxicas críticas
Este tipo de persona tóxica es muy común porque se la pasa todo el tiempo criticando. Tiende a realizar valoraciones negativas sobre otras personas, critica al grupo de amigos y tiende a mostrar una cara totalmente diferente cuando hay grupos de personas. Las críticas no suele hacerlas de frente, sino que critica a los que no están, y es normal preguntarse si no hará lo mismo sobre nosotros cuando no estamos en una reunión de amigos. Este tipo de personas no inspira confianza y tienen una total falta de transparencia en su forma de relacionarse.
Personas tóxicas interesadas
Este tipo de personas tóxicas son aquellas que nos utilizan como medio para un fin. Nos utilizan porque tenemos vehículo y necesitan llegar a algún lado, porque tenemos dinero y quieren que les compremos algo. Juegan con nuestros sentimientos y nos tratan de convencer de una amistad o sentimiento genuino, y al final de día terminan siendo falsas y mentirosas. Una forma muy habitual de actuar de las personas tóxicas interesadas es hacer planes con uno solamente cuando sus otras amistades no están disponibles, o cancelar planes a último momento sin tener en cuenta los sentimientos y el tiempo que la otra persona pone de si para reunirse.
Personas tóxicas que comparan
Un último tipo de persona tóxica, aunque existen muchos más y los seguiremos analizando, es aquel que compara todo. Desde la ropa y las actitudes hasta la forma divertirse, los tiempos y elecciones. Este tipo de personas tienen un alto componente de envidia y negatividad que les impide vivir su día a día sin compararse con los demás.
En distinto grado y dependiendo de nuestra propia personalidad, las personas tóxicas son una amenaza para nuestra vida. Terminan haciéndonos un poco más infelices cada día, y son personalidades que terminan dañando nuestra autoestima y haciéndonos tomar elecciones difíciles como dejar de hablar con un amigo de toda la vida porque descubrimos que, en el fondo, es envidioso, nos esta usando o simplemente no puede contener su propia envidia.