Por: Jean-Fabrice Vernet
Periodista
29/07/2021
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En 2011, la ONU designó el 30 de julio de cada año como el Día Internacional de la Amistad consolidando de esta forma tradiciones nacionales preexistentes. Este año como cada año, gobiernos y ONGs celebran eventos, actividades e iniciativas destinadas a promocionar la amistad en un mundo donde el diálogo, la solidaridad, la comprensión mutua, y la reconciliación pueden ser difíciles de encontrar. Este día especial cada año nos hace reflexionar sobre este tema en nuestras vidas con los demás; ¿qué rol entonces tiene la amistad en la asistencia sanitaria?
una amistad en el momento profesional que se debe diferenciar de una relación de amigos en la vida diaria
Trato amistoso entre paciente y profesional de la salud
Parece lógico que en toda profesión basada en el cuidado de los demás una actitud amistosa (una amistad en el momento profesional que se debe diferenciar de una relación de amigos en la vida diaria) es requerida de forma bidireccional entre paciente y profesional. La mayoría de las interacciones son cordiales y amables, aunque como es de esperar, este factor humano se hace notar más por su ausencia que su presencia. Todos y todas, alguna vez, hemos visitado un médico o una enfermera y hemos pensado que la persona quien nos atendió hubiese podido ser más amables con nosotros. De la misma forma hemos visto pacientes faltando al respeto o levantando la voz cuando debían abstenerse. Algunos centros de salud tienen en sus paredes carteles recordatorios de cuáles son las obligaciones de los profesionales tanto como de los pacientes con respecto al trato mutuo. Ambas partes necesitan sentir seguridad y respeto con su interlocutor.
La sonrisa sincera es una de las herramientas de comunicación más poderosas a la hora de facilitar el trato humano en cualquier situación. Desde la perspectiva del paciente la experiencia de la interacción es inseparable de la enfermedad, o de cualquier carencia en su salud y por ende de un cierto grado de sufrimiento. Por esta razón, los mejores y quizás la mayoría de los profesionales saben ser amables en tiempos difíciles. Lo ideal es poder ofrecer este tipo de trato amistoso puntual, sea cual sea el ánimo personal del médico o de la enfermera en el momento de su actuación. No se trata del grado de confianza o cariño que existe entre amigos, pero el trato amistoso es un factor real que debe ser fomentado dentro del centro como objetivo desde el liderazgo personal y jerárquico. Es parte del tratamiento holístico y puede influenciar en el desenlace de la consulta o de la cura.
Trato amistoso entre profesionales
Si una relación profesional resulta duradera y productiva mientras se desarrolla en armonía, se forma fácilmente una amistad verdadera o algo cercano a ella. Sin necesariamente llegar a tanto, la armonía y el respeto se cultivan entre compañer@s de trabajo con comportamientos análogos que incluyen la sonrisa y la solidaridad, y que son comparables hasta un punto a los comportamientos que deben ser adoptados a la hora de relacionarse con los pacientes también. Hay que enfocarse en el otro, ejercer la solidaridad.
Códigos profesionales
Es fácil describir la importancia general del buen humor, de la sonrisa, de la confianza, y del trato amistoso, aunque la reflexión debe incluir el alcance y lo límites de la amistad en la asistencia sanitaria. La deontología médica nos recuerda que conocer demasiado bien al puede dificultar el tratamiento en vez de facilitarlo.
Al haber perdido la objetividad es a menudo preferible no tratar a ese paciente, y que lo haga otro profesional. Los problemas potenciales incluyen entre otros juzgar el paciente de forma distinta, no poder darle trato preferencial a pesar de ser amigo, y encontrar más difícil mantener el “secreto profesional” cuando existen vínculos.
En las relaciones entre profesional y paciente que se prolongan en el tiempo debemos mantener la neutralidad, aunque es inevitable que nuestra humanidad enlace con la amistad en el proceso.
Si somos amigos antes del tratamiento se ha de valorar si podemos mantener una relación cuidador-paciente o si otro profesional lo hará mejor. Muchas veces esto depende de la seriedad de la condición. Situaciones similares ocurren entre profesionales sin por tanto ser regidas por reglas tan tajantes: ser amigos en el trabajo es posible, y esta amistad conlleva un grado de dificultad y retos de los cuales debemos ser conscientes.
Enlaces de interés/Leer más:
Día Internacional de la Amistad 30 de Julio
https://www.un.org/es/observances/friendship-day
Curso Online Humanizando la Salud
https://www.nus.agency/cursos/curso-online-humanizando-la-salud/
Curso Online de Liderazgo en Enfermería
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