No se conocen cuáles son las causas exactas que la provocan, pero sí se saben algunos factores determinantes para que la enfermedad de crohn tenga más probabilidades de desarrollarse. Los más importantes son:
- Los genes y antecedentes familiares.
- Los factores ambientales.
- El tabaco.
La enfermedad de Crohn no tiene cura, pero podemos tomar algunas medidas para controlar su efecto o disminuir las molestias que produce:
- Llevar una dieta sana y variada. Dependiendo del lugar de nuestra afección el médico nos recomendará consumir o evitar algunos alimentos. Además, necesitaremos ingerir mayores cantidades de algunas vitaminas concretas para combatir la enfermedad.
- Aprender a controlar el estrés. Es una enfermedad que nos puede causar cierta ansiedad y esto solo puede repercutirnos de forma negativa, por lo que es necesario aprender a convivir con ella.
- Tomar medicación. Para combatir las diarreas o los dolores leves el médico nos puede recetar algunos fármacos. Además de medicamentos concretos que actúan contra la enfermedad. Nunca debemos tomar aspirina, ibuprofeno o naproxeno, ya que pueden empeorar nuestro estado.
- Pasar por quirófano. Algunas personas tienen que operarse para eliminar zonas dañadas del intestino. El proceso quirúrgico también puede ser una solución para los pacientes que no responden a los medicamentos.
Foto: Eric Titcombe/Flickr (CC BY 2.0)
Debemos tener en cuenta que aunque sigamos todos estos pasos no erradicaremos la enfermedad, pero las mejoras serán ostensibles. El hecho de sufrir procesos cíclicos de recaídas nos podrá desmotivar y hacernos abandonar los tratamientos, pero esto es un error del que muy pronto nos acabaremos arrepintiendo. Además, muchos investigadores trabajan cada día para mejorar los tratamientos de esta enfermedad, por lo que no hay que perder la esperanza.
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Fuente: MedlinePlus
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