A pesar de que parezca muy temprano los trastornos del apetito se pueden dar en menores de 3 años, así que los primero que tenemos que conocer es de que trata este trastorno.
Se puede detectar un trastorno del apetito cuando detectamos que un niño menor de 3 años no alcanza un desarrollo normal en peso y talla.
No podemos decir que el desarrollo de un trastorno tenga el mismo patrón.
- Hay niños que presentan un peso inferior al 80% del peso ideal para su edad y desarrollo.
- Hay niños que presentan una caída de peso por debajo de dos percentiles a lo largo del tiempo (esto se puede observar en las curvas de crecimiento estandarizadas).
- Ganancia de peso inferior a la que correspondería a su edad. por ej
26-31 g/día entre 1 y 3 meses
17-18 g/día entre 3 y 6 meses
12-13 g/día entre 6 y 9 meses
9/-3 g/día entre 9 y 12 meses
7-9 g/día entre 1 y 3 años
Pero no todas las situaciones que se dan durante el crecimiento de los niños son alarmantes ya que también hay que considerar lo siguiente:
- El crecimiento de los niños no es algo matemático y que ocurra de forma homogénea, sino que puede suceder que en algunas temporadas ganen más peso y talla que en otras.
. El 20% de los niños sanos pasan por periodos de detención de crecimiento.
- El 5% de los lactantes durante las 3 primeras semanas pueden variar de peso subiendo o bajando. Incluso durante el primer años de vida pueden subir o bajar de peso con una diferencia de hasta 3 percentiles.
Debido a que no es un trastorno que se pueda describir tan solo con la talla del niños, como ya hemos visto, puesto que hay niños que tienen su propio tiempo de crecimiento, necesitamos saber que otros factores influyen a la hora de poder diagnosticar el trastorno en sí.
- Uno de los factores que influye son los ambientales. El contexto donde vive el niños es muy importante a la hora de desarrollar un tipo de trastorno de este tipo. La edad de los padres, el nivel socioeconómico de éstos, conocer si el embarazo fue deseado o no, conocer si los padres son consumidores habituales de sustancias tóxicas, o si existió algún tipo de problema durante el embarazo.
- Otro factor ha tener en cuenta es si existe algún otro trastorno en el bebé como pueden ser alteraciones neurológicas.
- Determinar en que momento de la vida del bebé comenzó la perdida alarmante de peso o el fracaso de cambio de talla.
- Conocer el estado de salud del bebé. Si fue un bebé prematuro, si ya presentó un retraso de crecimiento intrauterino o si padece algún trastorno digestivo, respiratorio, neurológico, malformaciones,....
Una vez que se ha diagnosticado un trastorno de la alimentación estos son los puntos que debemos conocer:
- Antecedentes de alimentación: tipo de lactancia, alimentación complementaria (como y cuando se realiza la introducción de los alimentos.
- Alimentación actual: La cantidad que come, la textura de lo que come (entero o pasado), los sabores que prefiere, lo que no le gusta....
-Cuál es el entorno donde tiene lugar la alimentación.
- Qué estrategias se están utilizando para dar de comer
- Quién es la persona que habitualmente le da de comer.
- Cuál es la actitud del niño y de la persona que le da de comer.
- Cuales son las vivencias de los momentos de alimentación para el propio niño y su familia.
Estos niños necesitan ayuda médica ya que es un problema grave y que puede tener repercusiones importantes. Pero desde casa también se puede actuar, así que vamos a ver como.
- Hay que evitar: Ver la televisión mientras se come, darle de comer entre horas, forzarlo, adularlo, chantajear...
- Se debe: comer tranquilamente, respetando los horarios, en familia, haciendo que el niño participe en la alimentación, crear un ambiente tranquilo durante la comida, estimular la alimentación independiente....