Uno de los regalos para el Día de la Madre que se me han ocurrido es un tratamiento de lujo a base de oro y sales del mar muerto. En primer lugar, se procede a una aplicación de un exfoliante corporal, seguido de un masaje hidratante con aceite de oro bio asimilable, para terminar con una envoltura natural de oro micro activo y extractos de té rojo. Un regalo relajante, que aumenta las defensas naturales de la piel, devolviéndola su juventud y dinamismo celular.
Por otra parte, el buen tiempo de mayo es ideal para realizar actividades en el Día de la Madre al aire libre y disfrutarlas en familia. Para las madres aventureras hacer piragüismo con los más pequeños puede ser una experiencia única, divertida y, por supuesto, refrescante. El colofón del día puede ser un picnic al atardecer. Un regalo especial para disfrutar en familia.
Mi última propuesta, son unas clases de baile, pueden ser latinos o de salón según el gusto de cada madre. Con este regalo no sólo se divertirá y conocerá gente, si no que además hará ejercicio sin darse cuenta, notando los beneficios que este aporta. Las más extrovertidas agradecerán este regalo.
Y tú, ¿ya tienes pensado el regalo para tu mamá?