Colaboración de D. Alfredo Castro Fernández
Estomatólogo y Experto en Salud Pública Oral
Profesor de Higiene Bucodental. IES Santa Aurelia (Sevilla)
1. Durante la quimioterapia se produce un estado de leucopenia (neutropenia) que facilita la incidencia de patología infecciosa oportunista.
Los dientes pueden ser una fuente de infección debido a su microbiota abundante y variada. Por ello se recomienda una revisión dental exhaustiva en todo sujeto previa a la quimioterapia con el objeto de determinar la existencia de focos infecciosos, incluyendo un examen radiológico que descarte patología periapical.
Cualquier tratamiento de exodoncia, restaurativo o periodontal deberá ser realizado convenientemente antes de iniciarse la quimioterapia, dado que la neutropenia junto con la trombocitopenia suponen riesgos de importantes complicaciones intra y postoperatorias.
2. Los pacientes en quimioterapia son particularmente susceptibles a la caries, debido a los efectos secundarios del tratamiento:
• La xerostomía (reversible a diferencia de la radioterapia) incrementa el riesgo de caries.
• La mucositis oral puede hacer difícil el mantenimiento de la higiene oral habitual
Es importante valorar la dieta de estos pacientes para determinar la frecuencia y momentos de exposiciones cariogénicas. Debe animarse a estos individuos a ingerir alimentos y bebidas libres de azúcares, planteando alternativas con edulcorantes no fermentables por la placa bacteriana dental.
3. La higiene oral debe incluir:
• Pasta dentífrica con alta concentración de flúor (aproximadamente 1450 ppm mínimo) dos veces por día, mejor con otros agentes remineralizantes añadidos como CPP/APC (MiPaste Plus®) o Novamin® (Sensodyne Repair&Protect®)
• Limpieza interproximal una vez al día
• Uso de colutorio fluorado diario tras cada cepillado dental, mejor con algún agente antiplaca (aceites esenciales, cetilpiridinio, clorhexidina de mantenimiento, zinc...)
• Higiene de dentaduras removibles estricta, tras las comidas y desinfección cada noche.
• Aplicación de gel fluorado cada noche mediante cubetas individuales
4. Para disminuir los síntomas de la xerostomía, pueden seguirse los siguientes consejos:
• Tomar frecuentes sorbos de agua
• Masticar chicles libres de azúcar para estimular la saliva (xylitol)
• Evitar alimentos secos (p. ej., galletitas saladas, bizcochos, patatas chips y similares)
• Evitar fumar, ingesta de alcohol y bebidas con cafeína
• Añadir salsas y jugos a los alimentos en las comidas
• Si es necesario, usar estimulantes y sustitutos de saliva (se deben recomendar preferiblemente aquellos con un pH neutro, con suplementos de fluoruro y un contenido lo más elevado posible en calcio y fosfatos) para paliar los síntomas y para la higiene oral diaria. Entre ellos, la gama de productos de Biotene® y la gama de productos de Xerostom®
5. Si aparece mucositis, el tratamiento dependerá de la gravedad y complicaciones asociadas (eritema, úlceras, grado de dolor, infecciones asociadas...). En general se aconseja:
• Cepillado dental con filamentos suaves o ultrasuaves, cambiando de cepillo muy frecuentemente (15 días máximo)
• Enjuagues frecuentes con solución salina (0,9% o 1 cucharadita de sal por litro de agua previamente hervida y enfriada) a la que se puede añadir bicarbonato sódico (2 cucharaditas por litro), para hidratar y reducir las probabilidades de desarrollar candidiasis oral.
• Uso de geles protectores y suavizantes de la mucosa, como Gelclair®
• Uso de hielo picado para enfriar la mucosa y aliviar ante molestias.
Mucositis Oral y Labial
*Bibliografía
-Nacional Cancer Institute (USA)
- Mouth Care in Cancer (UK)