¿Cuántas veces te has preguntado qué debes hacer para encontrarte mejor? Unos kilos de más, los dolores en la espalda por malas posturas, una alimentación que necesita una reconsideración o problemas para conciliar el sueño son solo algunos de los aspectos que empeoran nuestra salud y debemos prestar más atención sobre ellos.
Porque nuestra salud en la mejor inversión que podemos hacer, en este artículo compartimos contigo sencillos pero prácticos consejos para que tu salud vaya viento en popa sin apenas hacer nada.
5 Pautas sencillas para favorecer tu salud
Cuídate y mímate
Las prisas del día a día y las responsabilidades en ocasiones nos hacen que dejemos de prestar atención a lo más importante: nuestra salud. Por ello, nada mejor que dedicar tiempo a ti mismo acudiendo al médico con regularidad para hacerte un chequeo. Esta visita te permitirá saber cuál es el estado de tu salud, así como prevenir y detectar enfermedades. Mantén unos hábitos de vida saludables y no tengas miedo de visitar al médico. Está para ayudarte y velar por tu salud.
¿Dolores de espalda? Busca la posición correcta.
Al final de la jornada laboral, la espalda es una de las zonas del cuerpo donde más advertimos el dolor. ¿A qué se debe? Una mala postura en el trabajo o al dormir puede ocasionar dolores que, sin embargo, podemos prevenir. Ejercicios como el pilates o el yoga favorecen la flexibilidad, por lo que es muy recomendable su práctica. Por tanto, vigila la postura en el trabajo y dedica al menos 15 minutos del día a hacer algo de ejercicio.
No pares y haz ejercicio
Además de una dieta equilibrada, si deseamos perder peso, debemos acompañar una buena alimentación con una mayor cantidad de ejercicio físico. Aunque realices 5 comidas al día equilibradas y sanas, ponte en forma. ¿La razón? Hacer deporte relaja y actúa para prevenir enfermedades cardiovasculares. Ponte un objetivo y trata de cumplirlo poco a poco.
Activa tu mente
Para sentirnos mejor debemos cuidar nuestra salud física pero también emocional. Por esta razón, no dudes en leer libros, escuchar música, hacer pasatiempo, hacer teatro, aprender un nuevo idioma... De hecho, se ha demostrado que las personas más activas cerebralmente son menos propensas a sufrir enfermedades cognitivas.
Muestra siempre una sonrisa
La alegría es el ingrediente clave para sentirnos mejor con nosotros mismos y proyectar esa felicidad en los demás. Es una fuente de bienestar, capaz de liberar el estrés, la ansiedad y la mente de pensamientos negativos innecesarios.