¡Buenos días y feliz miércoles! ¿Cómo van esos propósitos?
En mi último post os contaba algunos trucos para controlar el apetito porque considero que a veces es lo que más nos tienta.
Hoy quiero compartir con vosotras mis sensaciones tras pasar mi primera revisión con la nutricionista. A principios de año decidí que debía volver a ponerme seria con el tema y que ya no sólo era cuidarme, si no aprender a comer mejor de lo que lo hacía y sobretodo bajar mi porcentaje de grasa.
Pues bien, no me había puesto un objetivo para la primera revisión ya que no quería agobiarme y decepcionarme al ver los resultados. En mi caso, bajar de peso es más difícil porque no hay mucho exceso, pero no es una excusa tampoco.
Rectifico, no me importa tanto bajar de peso, si no bajar mi porcentaje de grasa y aumentar mi masa muscular, eso sí.
Es muy importante tener claro estos conceptos ya que hay una gran diferencia...para que entendáis os pongo dos casos:
1. Una persona que pesa 60 kg pero tiene un 30% de grasa en su cuerpo y muy poca masa muscular.
2. Una persona que pesa 60 kg con un porcentaje de 17% de grasa y mucha masa muscular.
¿Lo entendéis? Es muy importante tener claros los objetivos.
Lo que queremos es quemar grasa, no perder peso, ya que el aumento de masa muscular también nos ayudará en la quema de grasas, y ya dedicaré un post a ello.
Resumiendo, ¡en mi primera visita he conseguido bajar 3kg de grasa, y yo más feliz que una perdiz!
Ahora para mi segunda revisión estoy deseando igualar la primera o superarme más aún, pero de eso se trata, de querer superarse y sobretodo de quererse a uno mismo. Está bien aceptarte tal y como eres y amar tu cuerpo, pero si puedes mejorar ¿por qué debes ponerte límites y excusas?
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Espero que después de leer este post hayáis entendido lo importante que es tener claro lo que uno quiere y que os haya servido de motivación para continuar luchando por vuestro cambio.
¡Muchos besos y feliz día!