La situación actual de pandemia que se vive, está obligando a repensar muy bien las cosas. Dentro de ellas, destacan incluso los procedimientos de higiene básica frente al combate de diversos gérmenes. Estoy segura, que ya mucha gente, ha tomado conciencia del potencial de contaminación que pueden tener unas manos insalubres.
Sobre todo, al caer en cuenta que muchas enfermedades infecciosas pueden transmitirse fácilmente mediante los microbios presentes en las manos. Muchas de estas infecciones afectan directamente el tracto gastrointestinal o las vías respiratorias. Algunas de esta infecciones que se presentan, suelen generar una serie de complicaciones. Muchas de ellas, se consideran de carácter grave, cuando compromete la salud de infantes, adultos mayores y personas con el sistema inmune descompensado.
Son muy frecuentes la transmisión de Salmonelosis y la gripe. La salmonelosis, se trata de una infección causada por la bacteria Salmonella. De acuerdo a los Centros de Control y Prevención de Enfermedades, esta bacteria, llega a causar un estimado de 1,4 millones de casos al año. La mayoría de ellos, son trasmitidos por el consumo de alimentos contaminados, causando un poco más de cuatrocientos decesos al año. De hecho, es un hábito tan importante, que puede significar una primera línea de defensa para evitar enfermedades comunes. Sobre todo, en los más chicos, que acostumbran a tocar ingenuamente muchas de las cosas del entorno. Se ha comprobado, que cuando los niños se contaminan con diversos gérmenes, generalmente, la familia entera también se infecta.
De este tema tan necesario, estoy hablando debido a diversidad de puntos de vista que se suscitan entre algunos seguidores. Y claro está, hay quienes han solicitado que les aclare realmente la importancia de este tradicional método de higiene. Aunque es una práctica cotidiana, consideré importante hablar de esta efectiva forma de prevenir enfermedades.
Origen del lavado de las manos
Hace menos de doscientos años, que es considerada importante como medida de salubridad en el control de enfermedades. Su incorporación formal, como medida preventiva, se logra, gracias a las observaciones de Ignaz Semmelweis, un médico húngaro. Él, trabajaba en el Hospital General de Viena, y en el año 1846 notó algo interesante. En dicho hospital, existían dos salas para atender a las mujeres parturientas. De esta forma, existía una sala atendida por comadronas y otra atendida por médicos y estudiantes de medicina. Según sus observaciones, las mujeres atendidas en la sala de médicos, eran más propensas a desarrollar fiebre y morir. Es decir, en la sala atendida por comadronas, los casos de fiebre y fallecimiento, eran mucho menores. Esto, llevó a Semmelweis a indagar más en profundidad. Pudiendo observar, que los médicos y estudiantes generalmente, asistían a la sala de maternidad luego de realizar una autopsia.
Tomando estas observaciones muy en serio, decidió plantear una teoría. La misma consistió, en que los médicos y estudiantes, al practicar la autopsia, contaminaban sus manos con “partículas cadavéricas”. Y por supuesto, de esta forma se realizaba la infección en las mujeres atendidas durante el parto. Así, este acucioso médico, decidió imponer como regla, el uso de cloro para el lavado de las manos de médicos y estudiantes. Sin embargo, en ese momento no fue acogida con beneplácito y muchos médicos decidieron no acatar. Algunos alegaban, que era el agua la causante de las enfermedades y no ellos con sus manos. Años después, en Scutari, Italia, Florence Nightingale la precursora de la enfermería moderna, implementó el lavado de las manos en un hospital de guerra de Crimea. Esto permitió reducir los procesos infecciosos.
Una lucha contracorriente
Romper paradigmas, no están fácil. Es por esto, que la propuesta de higiene de las manos promovidas por Semmelweis y Nightingale no fueron ampliamente adoptadas. Se podría decir, que esta sencilla forma de prevenir enfermedades, no fue considerada durante más de cien años. En general, se puede destacar, que lamentablemente, la promoción del lavado de manos se detuvo durante más de un siglo. Y no fue, sino hasta la década de 1980, cuando fue retomado por la CDC (Centros para el Control y Prevención de Enfermedades).
Ello ocurrió, debido a la aparición de ciertas enfermedades, que causaron honda preocupación en la población. Ello, condujo a la CDC, a elaborar las primeras pautas de higiene para el lavado de las manos. La misma, fue aprobada para todo Estados Unidos. De hecho, según este Centro, el lavado de las manos es una de las mejores formas de protegerse y de proteger a la familia de ciertas enfermedades. De acuerdo a investigaciones realizadas en el Reino Unido, se logró establecer un interesante hallazgo. Si todas las personas, se lavaran las manos apropiadamente y cuando corresponde, podrían prevenirse un millón de muertes al año.
Algunos ejemplos interinstitucionales a seguir
Aunque muchas personas no lo sepan, existe un Día Mundial del Lavado de Manos. El mismo, se celebra el día 15 del mes de octubre de cada año. El primero de ellos, fue celebrado el año 2008, impulsado por la Asociación Mundial del Lavado de Manos. Sus siglas en inglés, son GHP (Global Handwashing Partnership). Y su comité directivo, está conformado por empresas, organizaciones sin fines de lucro, organismos de investigación e instituciones oficiales.
Entre ellos se puede mencionar a: Colgate-Palmolive, FHI 360, la Facultad de Higiene y Medicina Tropical de Londres y UNICEF. Participan, además, la Agencia del gobierno de Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (USAID), Banco Mundial, y el Consejo de Colaboración para el Abastecimiento de Agua y el Saneamiento (WSSCC). En su inicio, logró movilizar a 120 millones de niños de 73 países, incentivándolos a lavarse las manos con jabón. Esta iniciativa, es respaldada y celebrada en la actualidad por gobiernos, instituciones internacionales, organizaciones civiles y organizaciones no gubernamentales (ONG). Incluyendo, empresas privadas y comunidades de todo el mundo.
Precisamente durante ese día, se promociona la comprensión sobre la importancia del lavado de manos con jabón. De acuerdo a la Asociación Mundial del Lavado de Manos, este día permite demostrar el valor de las manos limpias. Llegando a realizarse iniciativas importantes en algunos países en vías de desarrollo. Entre estas iniciativas, se puede mencionar la construcción y el mantenimiento de instalaciones para el adecuado lavado de las manos.
¿Qué ventajas ofrece el lavado de las manos?
Puede prevenir infecciones y salvar vidas
De acuerdo a la Asociación Mundial del Lavado de Manos, lavarse las manos con agua y jabón es equivalente a una “vacuna casera”. Incluso, se ha observado que cuando se practica en forma periódica, logra prevenir infecciones y salvar vidas. Es un pequeño tiempo invertido, que evita muchas visitas al médico y permite disfrutar de una salud más estable.
Se ha estudiado, que el lavado de manos con jabón impide la propagación de los gérmenes. Muchos de ellos, producen enfermedades diarreicas, dentro de las que se mencionanr: fiebre tifoidea, shigelosis y cólera. Además de ello, también protege de giardiasis, salmonelosis, hepatitis A, gastroenteritis, neumonía, gripe, bronquiolitis y meningitis. Esto, se menciona a manera de ejemplo, pues según la ciencia, realmente protegería de no menos de 200 enfermedades.
De hecho, según la OMS, el lavado frecuente de las manos, protege de muchas enfermedades usualmente tratadas con antibióticos. A nivel mundial, se ha observado que las enfermedades diarreicas y la neumonía son muy dañinas. Siendo consideradas, las principales causas de muerte a nivel mundial, en niños menores de cinco años.
Se ha logrado corroborar, que lavarse las manos adecuadamente, ayuda a reducir en un 20% la presencia de enfermedades respiratorias. Incluso, un estudio realizado en Pakistán, logró demostrar una reducción de más del 50%, de los casos relacionados con neumonía y diarreas, en niños menores de cinco años.
Es una medida muy efectiva en función de sus costos
Al observar con detenimiento, el lavado de las manos, otorga muchas ventajas, en comparación con otras intervenciones sanitarias. De hecho, esto es muy palpable cuando se realizan ciertas inversiones en potabilización, en países superpoblados como China e India. Se han logrado verificar, retornos de inversión, que oscilan entre 35 y 92 veces el costo inicial de lo invertido. Se ha observado, que las inversiones en infraestructura para la dotación de agua, también pueden garantizar que otras inversiones, sean aún más efectivas. Tal es el caso del suministro de los alimentos y la mejora en los servicios de salud y educación.
Está comprobado, que la mayoría de las familias poseen jabón en sus hogares. Bien sea para emplearlo en el lavado de los utensilios de cocina, bañarse o para el lavado de la ropa. Esto hace que la implementación de medidas como el lavado de las manos, sirva como una primera barrera, bastante eficaz, en la prevención de enfermedades.
Está asociada a mejores niveles de salud a nivel comunitario y en general
Está muy bien establecido, que el lavado de las manos, posee una gran influencia sobre la mejora de la salud. En este particular, es importante, la creación de conciencia que viene realizándose a nivel mundial. Sobre todo, considerando que existen momentos cruciales, en los cuales es ineludible el lavado de las manos. Me refiero en particular, el lavado que hay que realizar inmediatamente después de ir al baño y antes de manipular los alimentos.
Hay que estar conscientes, que las manos limpias, impiden que otros miembros de la familia se enfermen. Incluso, se ha observado que pueden ayudar a reducir la incidencia de ciertas enfermedades. Y eso no queda allí, si este ejemplo puede ampliarse. De esta forma, una adecuada higiene de las manos, a nivel del aula de clase, escuela, oficina o comunidad, pueden marcar la diferencia.
Se han observado poblaciones humanas, donde este sencillo hábito ha marcado la diferencia, lográndose mejores niveles de salud. Incluyendo, la prevención y la disminución sustancial de enfermedades. De hecho, el lavado de las manos, forma parte integral de uno de los Objetivos de Desarrollo Sostenible, impulsados por la ONU.
¿Cuándo debemos lavar nuestras manos?
Al lograr incorporar esta práctica, cada vez, será más fácil realizarla cada día. Por medio de ella, todos, tendrán una mejor salud. Por ello es muy importante, lavarlas en ciertos momentos específicos.
Al observarlas visiblemente sucias.
Antes de manipular los alimentos, durante su preparación y después de haberlos preparado, justo antes de servirlos.
Previo a la realización de cualquier comida o merienda.
Previo al contacto con personas enfermas y luego del contacto con las mismas. Sobre todo, si presentaban cuadros gastrointestinales con diarrea y vómitos. Además de enfermedades respiratorias con presencia de tos y estornudos.
Antes y después de curar heridas en cualquier parte del cuerpo.
Después de haber ido al baño.
Inmediatamente después de haber cambiado pañales o limpiado a un niño que utilizó el inodoro.
Luego de haberse sonado la nariz, estornudado o tosido.
Después de realizar contacto con algún animal o mascota, sus heces o alimentos.
Inmediatamente al ingresar a casa, luego de venir del exterior de la misma, bien caminando, trabajando en el jardín o realizando ejercicios.
Inmediatamente después de haber estado en contacto directo con contenedores de basura o paños de limpieza.
Tan pronto al regresar de lugares públicos. Sobre todo, si se estuvo en contacto con surtidores de gasolina, carros de compras, manijas de puertas, pasamanos, ascensores y pantallas electrónicas.
¿Cuál es la forma correcta de lavar nuestras manos?
De acuerdo a la OMS, para que el lavado de las manos sea correcto debe durar entre 40 y 60 segundos.
Mójarse las manos, utilizando agua fría o tibia
Aplicar suficiente jabón para cubrir toda la superficie de las mismas
Frotar las palmas de las manos entre sí
Frotar la palma de la mano derecha contra el dorso de la mano izquierda entrelazando los dedos
Ahora frotar la palma de la mano izquierda contra el dorso de la mano derecha entrelazando los dedos
Frotar las palmas de las manos entre sí, con los dedos entrelazados
Abrazar el pulgar izquierdo, rodeándolo por completo con la palma de la mano derecha y frotarlo con movimiento de rotación
Abrazar el pulgar derecho, rodeándolo por completo con la palma de la mano izquierda y frotarlo con movimiento de rotación
Frotar la punta de los dedos de la mano derecha sobre la palma de la mano izquierda, haciendo un movimiento de rotación
Frotar la punta de los dedos de la mano izquierda sobre la palma de la mano derecha, haciendo un movimiento de rotación
Enjuagar muy bien las manos
Secarlas con una toalla desechable
Cerrar el grifo del agua con la toalla
Concluyendo
Se ha observado la importancia de una adecuada técnica de lavado de las manos con agua y jabón. Posiblemente a muchos, tal vez les parezca un poco engorroso, pero mientras más higiénicas se encuentren menos contaminación habrá. Se pudo igualmente observar que las primeras personas que intentaron implementar una adecuada higiene de las manos, no fueron escuchadas en su momento. A veces los seres humanos actuamos así, tendemos a ser permanentemente incrédulos. Afortunadamente, el tiempo les dio la razón a estos magníficos impulsores de la salud y actualmente Ignaz Semmelweis, es conocido como el padre de la higiene de manos.
El tiempo actual, en el que estamos inmersos en una pandemia mundial, es un buen momento para crear hábitos saludables. Lavarse las manos adecuadamente, puede mantenerte muy sano y puede prevenir múltiples infecciones. En especial, dentro de las que causan más estragos se encuentran las enfermedades gastrointestinales y las del sistema respiratorio.
No olvidar los momentos clave para el lavado de las manos, haciendo uso de las metodologías que los expertos han desarrollado con mucho esfuerzo y horas de pruebas para garantizar su eficacia. Piensa en quienes te rodean, recuerda que, aunque estemos aislados temporalmente, no somos islas. Todos lo que hacemos, sobre todo a nivel del hogar, de la comunidad y del trabajo, repercute en nuestro entorno.
Por ello, al practicar normas adecuadas de higiene personal, empezando por las manos, además de proteger a todos y cada uno, lo hacemos con quienes nos rodean. Es importante recordar, lo que ha propiciado la gente de la Asociación Mundial del Lavado de Manos. Y, sobre todo, no olvidar que un correcto lavado de manos marca la diferencia entre una familia sana y otra con diversas enfermedades recurrentes. Actuemos de forma inteligente y acudamos confiados a esta sencilla pero eficiente “vacuna casera”.
“Lavarse las manos es el primer paso básico para lograr cualquier objetivo de desarrollo en este milenio. Simplemente salva vidas”
Kajol Devgan
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Referencias:
https://www.ncbi.nlm.nih.gov/pmc/articles/PMC3249958/
https://www.ccohs.ca/oshanswers/diseases/washing_hands.html
https://www.cdc.gov/handwashing/why-handwashing.html
https://www.betterhealth.vic.gov.au/health/conditionsandtreatments/handwashing-why-its-important
https://my.clevelandclinic.org/health/articles/17474-hand-washing
https://www.westernsussexhospitals.nhs.uk/services/infection-control/handwashing-important/
https://www.unicef.org/press-releases/fact-sheet-handwashing-soap-critical-fight-against-coronavirus-out-reach-billions
https://www.who.int/docs/default-source/coronaviruse/who-hh-community-campaign
https://www.smithsonianmag.com/science-nature/why-washing-your-hands-so-important
https://globalhandwashing.org/about-handwashing/history-of-handwashing/
