Si los consumes de forma habitual, estarás más preparado para prevenir cualquier tipo de enfermedad.
En 1989 Fuller definió a los Probióticos como: "Aquellos microorganismos vivos, principalmente bacterias y levaduras, que son agregados como suplemento en la dieta y que afectan en forma beneficiosa al desarrollo de la flora microbiana en el intestino".
Afectan beneficiosamente a una o varias funciones del organismo. Proporcionan un mejor estado de salud y bienestar y reducen el riesgo de enfermedad. Hay que mencionar que, para ser considerada como Probiótica, una bacteria tiene que sobrevivir al medio fuertemente ácido del estómago y colonizar el intestino delgado y grueso.
Esta palabra se deriva de dos vocablos, del latín -pro- que significa por o en favor de, y del griego –bios- que quiere decir vida.
Según la Organización Mundial para la Salud "los probioticos son microorganismos vivos que cuando son suministrados en cantidades adecuadas promueven beneficios en la salud del organismo huésped".
En general podríamos definir como probióticos los microorganismos vivos que se adicionan a un alimento y que permanecen activos en el intestino ejerciendo importantes efectos fisiológicos. Ingeridos en cantidades suficientes tienen efecto muy beneficioso, como contribuir al equilibrio de la flora bacteriana intestinal del huésped y potenciar el sistema inmunológico. Son capaces de atravesar el tubo digestivo, adherirse a la mucosa intestinal y recuperarse vivos en las heces.
Se han hecho experimentos en el que si se administra a un ratón recién nacido (que no tiene todavía microorganismos en su intestino) un cultivo de bacterias causante habitual de diarreas agudas, el E. coli, se produce la muerte casi instantánea. Si en vez de dárselo, se administra conjuntamente con el de una bacteria natural del intestino, el ratón sigue con vida, pues el segundo compite ecológicamente con el primero y digiere las peligrosas toxinas que segrega el E. coli.
Se sabe desde hace tiempo de las propiedades digestivas y normalizadoras que poseen los bacilos lácticos (existentes en los yogures frescos) sobre la función intestinal.
Son alimentos probióticos los yogures frescos, otras leches fermentadas, el kéfir, el kombucha, el chucrut, las aceitunas aliñadas, el rejuvelac etc. siempre y cuando estos alimentos no hayan sido pasteurizados o cocinados a más de 42 grados centígrados, ya que como seres vivos, no pueden ser sometidos a temperaturas que provoquen su muerte.
Los efectos de los Probióticos son varios incluyendo la modificación de la flora evitando la colonización patógena, la prevención del desequilibrio de la flora intestinal, la reducción de la incidencia y duración de diarreas, el mantenimiento de la integridad de las mucosas, la modulación de la inmunidad al evitar la translocación bacteriana, la producción de vitaminas como la B2, B6 y biotina, la asimilación de oligoelementos y la actividad antitumoral.
12 propiedades beneficiosas para nuestro organismo de los probióticos
Prevención y tratamiento de enfermedades infecciosas.
Disminución de los niveles de colesterol.
Disminución de diarreas, ya sea por virus, bacterias o parásitos.
Tratamiento de la intolerancia a la Lactosa.
Estimulación del sistema inmune.
Exclusión o reducción de la adherencia patógena.
Producción de ácidos y bacteriocinas antagonistas al crecimiento patógeno.
Formación de una flora intestinal balanceada.
Prevención de ciertas manifestaciones alérgicas.
Prevención del cáncer de Colon.
Tratamiento contra tumores.
Poseen efectos antimicrobianos.
Ya sabéis, incluir probióticos todos los días en vuestra dieta!