Estadísticas y estudios científicos afirman que tres de cada cuatro españoles sufre molestias gastrointestinales con frecuencia, aunque la mayoría de ellos considera que no son suficientes para pensar que no gozan de buena salud digestiva. Algunas de las molestias más habituales son fruto de la pesadez de estómago, los gases, y las flatulencias (científicamente conocidas como meteorismo).
Los malos hábitos alimenticios y el mal tránsito intestinal son las fuentes de que adolezcamos de gases y flatulencias. Se producen por una excesiva de acumulación de aire en el aparato digestivo, la cual provoca que el cuerpo se esfuerce en expulsarla. Lo cual muchas veces puede desencadenar momentos incómodos ademas de algunas dolencias estomacales.
¿Por qué se producen?
El ritmo de vida que nos vemos obligados a llevar con madrugones, ir de casa al trabajo, comer rápido, volver del trabajo a casa, y de los cuidados de la casa y de la familia, hacen que al final no le prestemos toda la atención que se debiera a la dieta. Al comer rápido se ingieren, junto a los alimentos, más dosis de aire que van a parar a nuestro estómago e intestinos y no al aparato respiratorio.
Sin embargo la rapidez al comer no son la única causa de este padecimiento. El tipo de comida que tomemos también tiene mucho que ver. Las legumbres son de los alimentos más problemáticos en este sentido. En teoría, si están bien cocidas no deben suponer mayores inconvenientes que otros alimentos, pero todo depende de cómo trabaje la flora intestinal. Concretamente, lo que desencadena este molesto proceso son la rafinosa y la estaquiosa (oligosacáridos), que son muy resistentes al ácido digestivo y las enzimas de las digestión, con las que al contactar generan metano, lo que explica los problemas de flatulencia.
El exceso de grasas y productos ricos en fibra también pueden provocar meteorismo si la persona que las ingiere es más propensa a padecer estos problemas.
Remedios naturales
Tanto para combatir la pesadez de una mala digestión, como los gases y las flatulencias, existen algunos remedios a base elementos naturales que ayudan a recuperar las buenas sensaciones.
El hinojo, tomillo, romero, o anís tienen propiedades carminativas que ayudan a eliminar los gases. Además son condimentos que los podemos añadir a las legumbres cuando se estén cociendo. Antes de la comida también es recomendable la ortiga, que mejora las digestiones; y para después de comer es muy común tomar una infusión de manzanilla o menta poleo.
Un remedio casero de siempre utilizado por las amas de casa, es romper el hervor de las legumbres durante la cocción. Consiste en interrumpir la cocción un instante o echarle agua fría para reducir la cantidad de oligosacáridos y que a la hora de la digestión no nos causen tantas molestias.
Medicamentos
Para calmar estas alteraciones, existen productos a disposición de todo el público en las farmacias. Contienen un elemento llamado Simeticona y se suelen tomar después de cada comida. El Aero-Red y el Aeroplex (unas perlas de Santiveri elaboradas con anís, hinojo y hierbabuena) son de los más conocidos.