Sabías que en la antigüedad los griegos solían recomendar montar a caballo para reducir molestias o con el fin de mejorar el estado anímico relajando el cuerpo y así evitar más enfermedades. Esta técnica poco a poco se fue extendiendo por toda Europa y hoy en día se utiliza para ayudar a personas con discapacidad física o psíquica como por ejemplo el autismo. A esta técnica se le conoce como equinotereapia o terapias ecuestres que se basan en realizar actividades con caballos ayudando positivamente al desarrollo físico, emocional, cognitivo y social de las personas que requieren de ayuda especial para que tengan una mejor calidad de vida.
Te preguntaras cómo es que funciona la Equinoterapia
El caballo, que es la herramienta principal de la práctica de la Equinoterapia, él es capaz de integrar, reeducar y rehabilitar a las personas debido a la conexión que las personas tienen al momento de entrar en contacto con ellos. Por eso es importante que desde el primer día de terapia la persona al momento de llegar salude el caballo para que este comience a reconocerlo y se dé una conexión especial, pues los caballos se dan cuenta de las características particulares de quien los monta.
Una vez que comienza la terapia se realizan cierto tipo de actividades que dependen del problema que el paciente presente, pero el caballo en específico brinda ciertas cualidades incomparables las cuales tratan de lo siguiente:
1. Transmisión de calor
Debido a que los caballos tienen un grado mayor de temperatura ayudan a distender músculos y ligamentos ayudando a que los pacientes desarrollen de una mejor manera sus actividades evitando la tensión de su cuerpo.
2. Transmisión de impulsos rítmicos.
Esto sucede al momento de montarlo pues los centros de gravedad coinciden y la persona percibe los impulsos rítmicos, variables y repetitivos que el caballo proporciona a la cadera del paciente, que va ascendiendo hacia la columna vertebral hasta llegar a la cabeza. Algunos de los beneficios de esta transmisión es la mejora de la postura de tronco, cabeza y cuello, mejor funcionamiento del aparato respiratorio y del sistema circulatorio.
3. Patrón de locomoción.
Los movimientos que genera el caballo son similares al de una marcha humana, los cuales se van memorizando en el cerebro para después automatizarse. Ayuda a relajar y ver todo desde otra perspectiva ayudando así a los pacientes con problemas emocionales, alteraciones motoras o de coordinación.
Una vez que se termina la terapia la persona debe despedirse del caballo en forma de agradecimiento para que así el caballo lo recuerde. Aunque no lo creas estos animales se dan cuenta de los problemas y de alguna forma también quieren ayudar manteniéndose dóciles y acoplándose aún más a la forma de trabajo del terapeuta para con el paciente.
¡Se han visto resultados increíbles!
Gracias a estas terapias la calidad de vida de las personas mejora mucho y poco a poco se notan los resultados. Es importante que, si detectas algún tipo de problema en tu hijo, que no precisamente tiene que ser físico, le des la importancia que necesita y lo atiendas, pues entre más pronto reconozcas el problema es más fácil y rápido mejorar su situación.
Es muy recomendable montar a caballo pues tiene muchos beneficios para el ser humano. Así que en el siguiente post hablaremos de ellos y del tipo de enfermedades en los que se ha visto evolución favorable gracias a esta práctica.
Fuentes:
Corazón y vida
Actiweb
Psicología y equinoterapia