1. Qué son y quién las sufre
Comúnmente conocidas como varices o venas varicosas, la definición más ajustada de esta dolencia es la que nos da su nombre médico, insuficiencia venosa crónica. Se produce por una inflamación o dilatación de las venas causada por anomalías en las válvulas y paredes de las mismas, que conllevan una alteración de la circulación de retorno al corazón. Una vez examinadas, el facultativo procederá a determinar el estadio y el tratamiento para paliar los dolores y molestias que provocan, aunque solo las intervenciones acabarán con ellas.
Como hemos dicho, esta patología es frecuente entre las personas mayores de 50 años, afectando a 1 de cada 2. Las mujeres tienen una mayor propensión a sufrirlas, ¿sabes por qué? Quizás conociendo los factores de riesgo, podamos adivinar la respuesta. Estos son los desencadenantes más comunes:
- Obesidad y sobrepeso: el aumento de peso y la presión que sufren las venas pueden generar varices.
- Sedentarismo: la actividad física estimula la circulación; el sendentarismo, su coacción.
- Factor hereditario: es el mayor factor de riesgo que influye en la aparición de varices.
- Anticonceptivos: la toma de anticonceptivos orales puede favorecer la mayor densidad de la sangre y la mala circulación.
- Embarazo: con el embarazo se complica el retorno venoso.
- Tabaquismo: los componentes nocivos del tabaco afectan, directamente, al tejido venoso.
2. Síntomas
Dependiendo del estado en el que se encuentre la afección, los síntomas son diferentes. En líneas generales, podemos decir que una exploración visual por parte del propio paciente, localiza el problema. Responden a una forma muy específica que permite un diagnóstico concreto: son de color azul o morado y suelen estar hinchadas o abultadas. Otros indicios que pueden revelar esta patología son:
- Dolor y calambres
- Adormecimiento
- Hinchazón
- Edema
- Cansancio
- Afecciones cutáneas: dermatitis, prurito...
3. Eliminación de varices: el endoláser
Al tratarse de una afección frecuente, los avances técnicos, que tienen como objetivo la eliminación de este problema circulatorio, se han alineado perfectamente con el progreso y hoy por hoy, encuentran en el láser el mejor de los tratamientos para el paciente. Las operaciones que hace unos años se realizaban a las personas que sufrían de varices consistía en estirar y arrancar las varices, con el traumatismo que ello conllevaba.
El descubrimiento de la técnica láser removió todos los cimientos y, actualmente, está considerada la más eficaz y menos invasiva. El endoláser es uno de sus tipos y su éxito, se fundamenta en tres pilares:
- El tratamiento no requiere hospitalización.
- Es un procedimiento exclusivo y efectivo.
- No interrumpe la rutina del paciente.
Como nos comenta el Dr. Jorge Arturo Almeida Guevara, miembro de Saluspot y experto en cirugía láser y varices, medicina estética y nutricional en CMA Salud, la técnica endoláser consiste en "introducir en el interior de la vena una microfibra de láser, entre 300 y 600 micras, que va a “quemar” el interior de la vena. De esta forma se produce su cierre progresivo y la eliminación de la variz...Tras el procedimiento, debe llevar la pierna tratada vendada durante 48 horas y, posteriormente, deberá llevar su media de compresión durante 15 días. Pero todo ello sin alterar en absoluto su vida normal. Es decir, puede caminar, conducir, hacer ejercicio y las actividades que realice habitualmente"
4. Prevención y cómo aliviar los síntomas
Si te has situado en alguno de los grupos de riesgo que hemos mencionado en párrafos anteriores, debes saber que hay algunas medidas que puedes tomar para prevenir la aparición de varices:
- Evitar el sedentarismo y realizar algún tipo de actividad.
- Seguir una dieta sana y equilibrada para no caer en el sobrepeso.
- Utilizar productos de comprensión como vendas y calcetines cuando se vaya a estar mucho tiempo de pie o viajes largos de avión.
- Usar prendas anchas y ligeras.
- No abusar de los zapatos de tacón.
Normalmente, las molestias que provoca esta dolencia, aumentan con el paso del tiempo. Lo único que está en nuestra mano son algunas medidas para aliviarlas, entre ellas:
- Las medidas preventivas listadas son también importantes para mejorar los dolores.
- El agua fría ayuda a contraer, lo que evitará que las venas se dilaten. Puedes activar la circulación con duchas frescas.
- Mantener la hidratación de la piel y evitar tomar el sol durante un tiempo prolongado.
- Mover las piernas en la medida de lo posible mientras que permanezcamos sentados.
- Estar mucho tiempo de pie.
¡Cuida tu circulación!
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