Cuando el problema es leve,
pueden ayudar masajes con aceites esenciales, tés de hierbas, o unas gotas de alguna tintura madre.
Unos masajes neuro-sedantes en la nuca, en el pecho, las sienes y la espalda con unas gotas de aceite puro de lavanda, romero, mejorana o melisa (ansioliticos) producen un estado de relajacion sin igual.
Habra que cuidar que se trate de aceites puros y no utilizarlos directamente sobre la piel, sino diluirlos previamente en el aceite vehicular (de oliva, de almendras, de germen de trigo, etc.).
Estos aromas facilitan la inducción del sueño. Incluso a los bebes, cuando están nerviosos se los tranquiliza rociando unas gotas de aceite puro de lavanda en la almohada.
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Y para finalizar, las tinturas madre, que son el concentrado de la planta. Unas gotas en un vaso con agua brindan una forma cómoda y eficaz de beneficiarnos con los efectos sedantes de las plantas.
Elegiremos una o varias de las siguientes: Hipérico, Tilo, Valeriana, Melisa, Manzanilla, Pasiflora.
Para que la recuperación del sueño sea duradera, trataremos de incorporar los siguientes alimentos a la dieta: Apio, avena, hinojo, lechuga, mejorana, papas.
Ahora solo falta acostarse sin pensar que nos tenemos que dormir, solo acostemonos a descansar el cuerpo, respiremos hondo y zzzzzzzzzzzzzzzzzzzzzzzzzzzzzzzzzzzzzzzzzzzzzz!!!
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