La felicidad y el bienestar psicológico no es algo que podemos sentir siempre, eso es un imposible, puesto que como nos suceden cosas negativas a nivel orgánico, también nos pasan cosas en la vida que afectan nuestro bienestar psicológico, pero si tenemos una base equilibrada podremos recuperarnos de mejor manera.
Estrategias para mantener una mente sana
A continuación describo, algunas cosas que tenemos que hacer para mantener nuestra mente sana:
1. Si cuidas tu cuerpo cuidas tu mente. Todo lo que pasa en la mente afecta al cuerpo y viceversa, por ello, es importante cuidarnos con la alimentación, el sueño y con ejercicios físicos, esto no es sólo es fundamental porque mejora el organismo, sino que también el ejercicio es eficaz para regular las emociones y al entrenar segregamos endorfinas que producen bienestar y placer.
2. Motívate para estar siempre aprendiendo algo nuevo. Este es un modo de alimentar y fortalecer nuestro cerebro que además de generar y aumentar el bienestar, ayuda a mantener la mente ágil y entrenada y permite retardar su envejecimiento. Busca ir subiendo la complejidad de a poco, poniéndote retos y objetivos alcanzables. Este es un consejo clave para mantener una mente sana.
3. Dedícate tiempo para hacer aquellas cosas y/o actividades que te producen placer. Esto que parece sencillo, es algo que vamos abandonando con la complejidad de la vida –trabajo, familia, niños, etc.-, pero es esencial para que nuestra mente se sienta bien, sana y rinda plenamente. Por ejemplo, escucha la música que te gusta –diferentes investigaciones concluyen que escuchar música proporciona múltiples beneficios psicológicos, tales como manejar y modificar los estados emocionales-, lee aquello que te encanta, sal a pasear si te apetece, viaja, diviértete con amigos, etc. En definitiva, para sentirte bien: dedícate tiempo.
4. También pasa tiempo con las personas que quieres, las buenas relaciones con los demás ayuda a sentirnos bien y a estar más positivos y alegres. Dedícales tiempo, apóyales y déjate ayudar por ellos.
5. Vive el presente, esto no implica que no tengamos en cuenta el pasado y el futuro. El pasado se evalúa y pensar en el futuro sirve para organizarnos, pero siempre con la cabeza puesta en nuestro presente actual, contemplando con plenitud lo que estamos haciendo, lo que pensamos y lo que sentimos.
6. No te obsesiones por lo que piensen de ti, Hay que tener en cuenta lo que las personas, que nos quieren o conocen, dicen de nosotros, pero recuerda que son sólo opiniones, nunca hagas sólo las cosas por lo que opinan los otros. Lo que importa es lo que tú piensas de ti mismo y de lo satisfecho y orgulloso que te sientas con tu vida.
7. Debemos aceptar que no todo puede ir bien en nuestras vidas y así y todo podemos sentirnos bien. Si esperamos que todo esté perfecto, nunca nos encontraremos satisfechos, porque siempre falta o falla algo.
8. Sácate la mochila del pasado. Muchas veces las cosas que nos han sucedido nos abruman y no nos dejan avanzar, otras veces bloquean nuestra mente, y no podemos pensar ni sentir con claridad. Por ello, debes elaborarlo, si no puedes sólo, recurre a un psicólogo que te ayude. Si el pasado está en orden tu presente estará bien.
9. El bienestar está en poder disfrutar de los procesos. No pienses que la felicidad está sólo en lograr el objetivo, aprende a disfrutar del camino que recorremos para alcanzarlo. Justamente si contemplamos el proceso estamos en el presente, y no en el futuro. Pensemos que lograr el objetivo es un instante, pasamos mucho más tiempo tratando de alcanzarlo.
10. Acepta las emociones negativas. Pensamos muchas veces que los sentimientos, como la pena, el enfado, la frustración, etc., son algo que no podemos ni debemos sentir, pero esto es erróneo, porque tanto estas emociones, como las positivas, cumplen funciones importantes para nuestro bienestar. Tomemos el caso del miedo, si lo sentimos en un grado adecuado, por ejemplo ante un trabajo que tenemos que entregar a nuestro jefe, nos hará estar alerta, prepararlo a fondo, hacerlo lo mejor posible, etc. Por ello, el problema de las emociones es cuando su intensidad es muy elevada o cuando aparecen en situaciones que no corresponden.
Todas las emociones bien reguladas, son necesarias y útiles. Por ello, que nos sintamos en un momento mal, no significa que seamos infelices y estemos enfermos psicológicamente. Las emociones negativas son necesarias para estar sanos y poder sentirnos con plenitud.
Existen más cosas que podemos hacer, pero considero estas 10 propuestas, como esenciales para llegar a tener una mente sana, joven, vital y plena. Y recuerda, no sólo te preocupes por el cuerpo, la mente también se cuida, se entrena y se potencia.