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En nuestro país hay cuatro millones de personas con diabetes a las que la gripe, al igual que cualquier otra enfermedad infecciosa, puede provocar fiebre y elevación de los niveles de glucosa. Pero, además, su sistema inmunitario se debilita y hace al paciente más vulnerable a las infecciones, como la neumonía. Concretamente, las personas que padecen de diabetes con tres veces más vulnerables al momento de contraer enfermedades respiratorias que las personas que no las padecen diabetes.
Por otro lado, la gripe y los resfriados pueden causar náuseas, vómitos y diarrea, lo cual hace que los niveles de glucosa se descompensen si no se aumenta el consumo de líquidos. Además, los estados febriles se suelen acompañar de pérdida de apetito, con lo cual la cantidad de alimentos que se ingieren puede ser menor, descompensándose igualmente los niveles de glucosa en sangre.
Por si fuera poco, algunos medicamentos de venta libre para mitigar los síntomas gripales contienen azúcar, lo cual provoca un aumento de los niveles de glucosa en sangre.
Para evitar posibles complicaciones, la SED ha elaborado el siguiente decálogo de recomendaciones:
1- Acudir al médico para que confirme el diagnóstico y de pautas individualizadas para el control de la gripe y de la diabetes.
2- No automedicarse.
3- No dejar de tomar la medicación y seguir administrando la insulina de acuerdo a las indicaciones de su medico. En algunos casos el profesional podría aumentar la dosis.
4- Controlar la glucosa en sangre cada cuatro horas (o según pauta).
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5- En el caso de las personas con tratamiento con insulina, y especialmente con diabetes tipo 1, mujeres embarazadas y niños, es importante, además, mantener un registro de los resultados.
6- También deben realizarse controles de cetonemia o cetonuria y tener una pauta de corrección, o al menos conocer la importancia de esta situación para acudir al médico si aparece cetosis.
7- Beber más cantidad de líquido (bebidas sin calorías) y seguir alimentándose normalmente.
8- Controlar el peso. Es recomendable pesarse continuamente, ya que adelgazar puede causar alteraciones en los niveles de glucosa en la sangre.
9- Vacunarse contra la gripe durante los meses de octubre y noviembre. Aunque no proteja al 100%, la vacuna hace que sea más difícil contraer la gripe durante los seis meses posteriores.
10-Consultar al especialista la necesidad de vacunarse frente al neumococo, ya que las personas con diabetes son tres veces más propensas a padecer enfermedades respiratorias.
Toma nota. ¿Conocías los riesgos de contraer gripe si se tiene diabetes?