Cuando se trata de los accidentes, hay algunos muy comunes y, sin importar si cuentas con seguro de hogar o no, es muy importante estar atento de todos los miembros de la familia para que, en el caso de que lleguen a suceder, puedas actuar de manera inmediata.
Los accidentes más comunes en el hogar son:
Quemaduras. Este tipo de accidentes es uno de los más comunes en el hogar. El principal lugar donde suceden es en la cocina, mientras se prepara la comida o al acercarse al horno, sin embargo, otro lugar muy común donde se pueden presentar quemaduras es el baño, por lo que es importante revisar la temperatura del agua con la que vamos a bañarnos o a nuestros hijos si es que aún son bebés, para evitar quemaduras graves.
Descarga eléctrica. Este es otro de los accidentes más comunes y, desafortunadamente, suele ser uno de los más recurrentes en niños. No se trata solo de los contactos, el dejar conectados cargadores, por ejemplo, llama la atención de los niños, que se los pueden llevar a la boca y desencadenar un incidente grave.
Intoxicación. Volviendo al tema de que los niños se llevan casi todo a la boca, la intoxicación es uno de los accidentes más comunes. Guardar líquidos de limpieza en botellas de refresco o jugo hace que esto sea más peligroso, es importante mantenerlos bien etiquetados y sellados. Sin embargo los adultos tampoco están a salvo de este tipo de accidentes. Las intoxicaciones en adultos suelen venir de la ingesta de medicamentos caducados.
Caídas/Golpes. Podría parecer obvio, pero las caídas suelen ser más perjudiciales de lo que imaginamos, incluso en el propio hogar. Para poder estar un poco más protegidos es necesario tener pasillos libres y barandillas resistentes.
Los accidentes no se pueden evitar, pero podemos estar protegidos ante ellos, contar con un seguro de hogar que ofrece asistencia médica a domicilio, ubicar los hospitales cercanos y los números de emergencia es una buena manera de comenzar a actuar y estar prevenidos ante emergencias.