Cómo carajo hago

Me ha escrito un lector preguntándome las palabras que más veces yo me he preguntado en mi vida: ¿cómo carajo hago?

Cómo carajo hago para liberarme de lo que me ata, cómo hago para estar libre, trabajar poco y ganar mucho.

Mi respuesta corta, y sesgada, es: lee muchos libros de desarrollo personal, sólo los mejores. Empieza por Hábitos atómicos de James Clear y De entrada diga no de Jim Camp. Haz muchos cursos de Vipassana para eliminar tus impurezas mentales y que puedas concentrarte en aquello bueno para ti. Enfréntate gradualmente a tus miedos. Elimina el ruido de tu vida como si fueras a morir mañana. Ahorra como si te fuera la vida en ello: para lograrlo, la próxima vez que vayas a comprarte algo que no necesitas, no lo compres. Después, cuando tengas un colchón o una red de seguridad, invierte como si te fuera la vida en ello. Aprende a amarte. Crea acciones de gran impacto a menudo en todas las áreas de tu vida. Recuerda que olvidarás todo esto. Trata de recordarlo a menudo viendo vídeos de poder y leyendo libros de poder.

Mi respuesta larga, y sesgada, es:

Cuando era pequeño y veía a los demás niños sacar buenas notas, además de hacer todo lo que hacían en la semana, me preguntaba, especialmente en septiembre al inicio de cada curso: ¿cómo carajo hago?

Cuando mi padre me pedía que le ayudase a algo, sin ayudarme él primero a comprender qué quería que hiciera y por qué, me preguntaba: ¿cómo carajo hago?

En todas mis relaciones, hasta hace no mucho, al darme cuenta de mi patética capacidad de comunicarme con otro ser humano, me preguntaba: ¿cómo carajo hago?

Cuando empecé a trabajar para otros, y pasaba horas descargando camiones, o fregando platos, o atendiendo clientes con prisas, o hasta recogiendo basuras, y quería escapar y esconderme bajo tierra, me preguntaba: ¿cómo carajo hago?

Podría decirte, de memoria, al menos mil cómo carajos hago, y aún no estaría ni acercándome a todas esas veces que me lo he preguntado y sigo preguntándomelo.

Mi respuesta, por si a alguien le sirve de algo, es:

Paso 1: ser consciente de que no sé nada. Desde siempre he sabido que era ignorante a dolor. Las únicas veces que he creído saber algo (muchas), ha sido por ignorancia. No sé nada. Todo lo que veo es una realidad sesgada y fragmentada. A medida que soy más sabio, si es que eso significa algo, más cuenta me doy que lo mejor que podemos entrenar en nuestra vida es el estar callados.

Paso 2: saber que es posible mejorar. La mera sospecha de que podemos mejorar como seres humanos, ha sido y es mi motor. Por mucho que mejore, siempre podré ser más grande. El tamaño de los maestros (Buda, Jesús, etc) es tan grande que no podemos siquiera imaginarlo. Eso me hace saber que el margen de mejora es infinito y que, esté en el punto que esté, siempre podré crecer. Crecer requiere esfuerzo. Dejarse morir, no.

Paso 3: adquirir toda la información posible leyendo libros donde explican cómo carajo. Cómo carajo ser más rico. Cómo carajo ser más disciplinado. Cómo carajo tener más foco. Cómo carajo tener más salud. Etc. No sólo leo libros de esos, también leo novelas, pero sólo si son magníficas novelas, validadas durante generaciones. Sí, actualmente hay muy buenas, pero creo que hay más en el pasado de lo que hay en el presente, por eso acudo más al pasado. La información precede a la acción. Nuestra tarea consiste en buscar información nutritiva para conseguir realizar acciones nutritiva.

Paso 4: odiar (o tener miedo a) mi vida con la suficiente intensidad para darme cuenta de que algo estoy haciendo mal, las millones de veces que he perdido el tiempo miserablemente con cosas que sólo me hacen peor persona. O como diría Jordan Peterson: STOP DOING WHAT YOU KNOW IS WRONG! Ejemplo: no hay tele en mi casa. Veo una serie de netflix al año y porque alguien que aprecio y admiro, me la recomienda encarecidamente. Cada poco tiempo borro instagram de mi móvil (hasta que sea capaz de borrarlo entero y definitivamente voy dando pasos hacia ello). No veo pornografía, o la veo poco, con intención de borrarla de mi vida para siempre. Quiero quitarme el móvil normal, y comprar un móvil antiguo sólo para llamadas y mensajes. ¿Y el GPS? Dirán algunos. Cuando eres rico, y tienes tiempo, puedes permitirte perderte 30 veces para llegar a un lugar. Además, prefiero ir perdido, a ser esclavo. Me alejo del alcohol. Me alejo de la comida basura. Trato de alejarme de todo lo que es nocivo para mí.

Paso 5: tener miedo a ser pequeño.

Paso 6: amar con suficiente intensidad como para que me sacuda, aquello que sé es bueno para mí.

Paso 7: comprender que pequeño o grande es sólo una percepción sesgada, que todo está bien, que todos estamos en un proceso y que las culpas, las grandezas y pequeñeces, no sirven de nada. Sólo somos.

Paso 8: en cuanto me doy cuenta de que algo es bueno para mí, trato de pegarme a ello como una lapa. Si la meditación es buena, me sumerjo en la experiencia. Lo mismo con el Yoga. Con los libros de desarrollo personal. Con las personas positivas.

Paso 9: leo las enseñanzas de Buda a menudo. Todo este email, Buda lo resumiría en: haz el bien, evita el mal.

Olvidarás todo esto.

Trata de recordarlo a menudo.

No te rías de este vídeo de aquí abajo si no lo comprendes, pues podría tener razón.