La carne de caza supone sin duda el ideal de una dieta paleo. Estos animales salvajes se alimentan conforme a su naturaleza y realizan el ejercicio óptimo. Esto hace que su carne tenga los mejores valores. La grasa de la carne de caza es una grasa sana y que suele encontrarse en vetas y en mucha menos cantidad que en los animales criados en corral.
La carne de caza puede tener un sabor fuerte para aquellos que no están acostumbrados, pero no hay duda que si se acostumbra el gusto es la más sabrosa de todas. Son preferibles las recetas que potencian su sabor a aquellas que tratan de enmascararlo.
Jabalí, una carne magra de gran sabor.
La carne del jabalí tiene muy bajo contenido en grasa. Por este motivo no es la mejor opción para cocinar a la brasa, ya que puede quedar un poco seca. Es mucho mejor hornearla o guisarla a fuego muy lento para sacarle el mejor partido.
Jabalí con puré de manzana. Receta para cuatro personas: 1kg de carne de jabalí en trozos; una cebolla grande de sabor dulce; un tomate maduro para salsa; dos vasos de vino tinto; tomillo, orégano y romero frescos; ajo. Para el puré de manzana: 1/2 kilo de manzanas, dos ramas de canela, 1 taza de agua, zumo de medio limón y dos cucharadas de miel.
Preparación: Es conveniente que la carne se deje al menos un día en la nevera macerando y mejor si lo dejamos dos. Para esto se pone en un recipiente, se le añade el vino, el ajo, un poco de cebolla y las especias. Al día siguiente en una olla de barro se echa un poco de aceite, el resto de la cebolla picada y la carne. Se rehoga y se añade el resto de la marinada y el tomate en salsa. Hay que hacerlo a fuego muy lento y dejar que se cocine al menos dos horas. Aunque se puede comer el mismo día, muchos cocineros recomiendan cocinarlo la noche antes y volverlo a calentar al día siguiente antes de consumirlo.
Para el puré de manzana hay que limpiar y trocear la fruta. Se pone a hervir en el agua y la canela hasta que la manzana está bien blanda. Se pasa por el pasapurés y se vuelve al poner al fuego lento. Se añade la miel y se revuelve con cuidado hasta que queda bien ligado.
Perdices con ñoras y almendra.
Ingredientes para dos personas: dos perdices, dos ñoras, 2 cebollas, 150 gramos de almendras naturales peladas, medio vaso de aceite de oliva o de coco y medio vaso de vino blanco. Laurel y pimienta para condimentar.
Preparación: Se fríen las perdices limpias en aceite hasta que estén doradas. Se reservan y en ese mismo aceite se sofríen las ñoras y las almendras. Las retiramos y continuamos aprovechando el mismo aceite para freír la cebolla. Se añade el vino y se deja hacer a fuego lento. Se mezcla con las almendras y las ñoras y se pasa por la batidora hasta que esté bien triturado. Esta mezcla se vierte sobre las perdices y se mete todo en la nevera hasta el día siguiente. Pasadas al menos doce horas metemos las perdices al horno y dejamos que se hagan a fuego lento.
Este plato se puede acompañar por unos champiñones laminados al ajillo, cocinados en una olla de barro con aceite, ajo y un poco de vino blanco.
La carne de caza, siempre con garantías.
No olvide que a la hora de adquirir carne de caza debe de hacerlo siempre en establecimientos autorizados que le garanticen que ha pasado todos los controles sanitarios y es perfectamente apta para el consumo humano. De otra forma estaríamos corriendo el riesgo de sufrir enfermedades como tuberculosis, triquinosis o brucelosis entre otras.