Algunas mujeres han encontrado que el papel higiénico perfumado o de color puede dañar las delicadas membranas en el área genital, causando irritación, que luego le da al hongo la oportunidad de invadir. Lo mismo es cierto de los detergentes perfumados y suavizantes de tejidos. Los desodorantes femeninos en aerosol que contienen aromas o sustancias químicas que provocan irritación también se deben evitar. Algunos productos personales también pueden cambiar el nivel de pH en el nivel genital, lo que provoca una infección por hongos cándida.
Asegúrate de utilizar un jabón sin perfume en la ducha o el baño, y no utilices jabones que contengan desinfectantes, ya que este mata las bacterias que mantienen al hongo bajo control. Dado que los antibióticos por lo común se añaden a muchos productos personales, asegúrate de revisar la etiqueta siempre. Algunas marcas de condones, por ejemplo, contienen agentes antibacterianos, y pueden desencadenar una infección por levaduras en los hombres y sus parejas.
Si tienes infecciones recurrentes por hongos, es posible que debas cambiar a un jabón que no posea agentes antibacteriano, y evita la limpieza del hogar que prometa matar los gérmenes.
Dado que cada persona es diferente, un producto personal que funciona bien para una persona podría desencadenar una infección por hongos en otra.