El hígado es el órgano más grande que tenemos dentro de nuestro cuerpo, responsable de tareas tan importantes como el filtrado de la sangre, la eliminación de las toxinas y la producción y almacenamiento de proteínas.
Aunque el hígado tiene la capacidad de depurarse a sí mismo (normalmente lo hace de madrugada mientras dormimos y las funciones vitales se ralentizan), debido a factores como la mala alimentación, el estrés o los malos hábitos, su correcta depuración puede verse afectada, necesitando de nuestra ayuda para evitar la saturación de toxinas y un mal funcionamiento del mismo.
En artículos anteriores aprendimos a elaborar un sencillo remedio para limpiar el hígado y bajar de peso en 4 días, así como varias soluciones naturales para limpiar y desinflamar el hígado y la vesícula. Hoy conoceremos 4 infusiones que podemos preparar fácilmente en casa para depurar este órgano en profundidad.
Cómo desintoxicar el hígado naturalmente
1. Infusión de espárragos
Los espárragos son conocidos por su excelente capacidad para depurar los riñones, cualidad que también funciona con el hígado, ya que además de contribuir a eliminar las toxinas a través de la orina, favorece la descomposición del alcohol y mejora la actividad enzimática del hígado.
Cómo prepararla
Hierve un par de tazas de agua y un puñado de espárragos verdes (bien lavados) durante 5 minutos. Deja reposar, añade una bolsita de manzanilla para mejorar el sabor, cuela, endulza y tómalo 2 o 3 veces al día siendo la primera en ayunas.
2. Infusión de cardo mariano y menta
Además de ayudar en su limpieza, contribuye a desinflamar el hígado y la vesícula. Una de las hierbas más recomendadas para mantener una buena salud hepática.
Cómo prepararla
Hierve un puñado de cardo mariano en agua durante un par de minutos. Deja reposar, añade una bolsita de menta para mejorar el sabor, cuela y endulza con un poco de miel. Toma 2 tazas diarias durante al menos un mes completo.
3. Infusión de diente de león
Además de ayudarnos a eliminar las toxinas de la sangre, posee grandes propiedades diuréticas y antiinflamatorias que resultan de gran ayuda para tratar un gran número de problemas.
Cómo elaborarla
Hierve un puñado de diente de león en agua. Deja reposar, cuela y endulza con miel. Toma 3 veces al día durante al menos dos semanas. Puedes añadir un poco de menta o manzanilla para darle más sabor, así como complementarla con cualquier otra infusión depurativa.
4. Infusión de manzanilla y acelgas
Su alto contenido en antioxidantes, vitaminas A y C así como hierro, magnesio o calcio, convierten a la acelga en uno de esos alimentos depurativos que no deberían faltar en nuestra alimentación. Además de comerla hervida, podemos utilizar su agua para depurar hígado y riñones, ¡así que no la tires!
Cómo prepararla
Reserva el agua donde hayas cocido las acelgas y añade una bolsita de manzanilla. Deja reposar durante unos minutos, retira la bolsita y endulza con miel. Puedes combinarla con cualquier otra infusión o bebida depurativa.
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