4 errores que cometerás en el trabajo (+soluciones)

Seamos realistas: siempre habrán errores que cometerás en el trabajo; son esas muchas cosas aterradoras con las que debes lidiar en el trabajo.

Tal vez te preocupa la seguridad de tu puesto. Quizás haya un proyecto desalentador que persiga tus sueños. O tal vez es la cafetera vacía en la sala de descanso lo que da pistas a la banda sonora de la película de terror en tu cerebro.

Pero, cuando se trata de nuestros temores relacionados con el trabajo, hay uno que a menudo se ubica cerca de la parte superior de la lista: los errores que cometerás en el trabajo.

Errores que cometerás en el trabajo

Los errores que cometes en el trabajo pueden abarcar desde pequeños (ups, enviaste a la persona equivocada un correo electrónico) a grandes (sin querer filtraron información confidencial).

A continuación, detallamos algunos de errores que cometerás en el trabajo y te brindamos algunos consejos para ayudarte a recuperarte de ellos, ya sabes, sin esconderte en la posición fetal debajo de tu escritorio.

Perdiste una fecha límite

Estabas demasiado abrumada para cumplir con esa fecha de finalización. Pensaste con seguridad que no sería hasta la próxima semana. Independientemente de la causa de tu retraso, dejaste pasar el plazo y ahora estás retrasada.

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Cómo recuperarte

Cuanto antes puedas actuar, mejor. En el momento en que te des cuenta de que deaste caer la pelota en una fecha límite, informa a tu supervisor y a los miembros relevantes del equipo para que puedan ajustar las expectativas o tus propias cargas de trabajo en consecuencia.

En ese mismo aliento, asegúrate de decir que lamentas haberlo arruinado (nos pasa a todos, ¡pero eso no significa que debas saltarte una disculpa!) Y presenta un plan para saber exactamente cómo poner las cosas de nuevo en camino.

Ya sea que eso signifique quedarte hasta tarde o retrasar un proyecto diferente por ahora, insértalos en tu plan para avanzar para que sepan que no solo estás señalando tu error: ya has elaborado una estrategia para corregirlo.

Has entendido mal una tarea

Pensaste que tenías una buena comprensión de lo que se requería para esa tarea o proyecto, así que te arremangaste y cargaste con tu visión. Como resultado, estabas bastante lejos con tu comprensión, y ahora has dedicado horas a algo que no es lo que tu jefe o tu equipo estaban buscando.

Cómo recuperarse

Admitir que avanzaste con la percepción totalmente equivocada puede ser vergonzoso, pero será mucho mejor que tratar de exprimir esa asignación cuadrada en un agujero redondo.

Admite a tu equipo que no fue tan claro como pensaba que estaba en lo que se te preguntó y, si es necesario, señala los lugares donde cree que ocurrió la confusión. Eso ayudará a todos vosotros a comunicaros más claramente acerca de las expectativas y los requisitos para avanzar.



¿Siguiente? La tentación de sumergirte y corregir sus errores es fuerte (¡oye, quieres hacer esto bien!), Pero resiste ese impulso. Es mucho mejor asegurarte de que esté claro como el cristal ahora, así que haz algunas preguntas aclaratorias para confirmar que tienes la comprensión correcta.

Le dijiste algo a la persona equivocada

¿Estás listo para uno de los errores más dolorosos de todos? Ya sea que “respondiste todo” con una respuesta sarcástica que solo estaba destinada a una persona o que te pillaron chismorreando con las manos en la masa en el baño, alguien en tu oficina recibió un mensaje que no estaba destinado a sus ojos u oídos. Estás mortificado y también atascado en cómo avanzar.

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Cómo recuperarse

La forma exacta de abordar esto variará según el contenido de tu respuesta o comentario (y cuán inapropiado o poco profesional fue para la oficina).

La regla general es que debes acercarte a quien recibió el comentario para disculparte por tu error, reconocer el hecho de que es algo que no deberías haber dicho y explicar que vas a hacer un mejor trabajo ser consciente de lo que comunicas en la oficina.

Por supuesto, si lo que dijizte fue realmente ofensivo o inapropiado, es probable que debas tomar medidas adicionales, como comunicarlo a tu supervisor y/o departamento de recursos humanos. Sin embargo, lo anterior te ayudará a pasar de un comentario improvisado típico que fue interceptado.

Sobreestimaste tus capacidades

En una reunión de equipo, tu jefe preguntó si alguien podría construir una tabla dinámica en Excel para identificar sus productos más rentables por trimestre y ver si hay alguna estacionalidad. Querías ser una empleado estelar, por lo que levantaste la mano con entusiasmo. No pasa mucho tiempo antes de volver a tu escritorio para consultar en Google de qué va la tarea que acabas de pedir.

Cómo recuperarse

En primer lugar, tu deseo de intensificar es admirable. Y, si tienes algo de tiempo a tu disposición para tratar de explorar algunos recursos y ponerte al día con lo que acordaste, definitivamente puedes hacerlo.

Explica que siempre está entusiasmada con la oportunidad de ayudar y probar algo nuevo, que es lo que te inspiró a aceptar esta tarea. Sin embargo, desde entonces te has dado cuenta de que no tienes los conocimientos para hacer bien este trabajo.



A partir de ahí, detalla cuál te gustaría que fuera el siguiente paso. ¿Estarías dispuesta a asociarte con alguien que tenga un poco más de experiencia? ¿Quieres saber si hay recursos a los que tu jefe podría recomendarte? ¿Esperas sacar esa tarea de tu plato por completo?

Deje eso claro a tu supervisor, para que ambos puedan acordar la mejor manera de comenzar desde aquí. Solo prepárate para que no puedas lavarte las manos de esa obligación de inmediato. Recuerda, inicialmente estuviste de acuerdo, por lo que debes estar dispuesta a ayudar a solucionarlo.

No siempre es fácil tragarse el orgullo y resaltar los errores. Pero, hacerlo en realidad muestra mucha humildad y profesionalismo y te da la oportunidad de hacer las cosas bien.
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