El verdadero problema del miedo surge cuando se convierte en pánico, cuando limita nuestro accionar y bloquea nuestro día a día. La solución que encuentran muchas personas ante temores tan fuertes es la de evitar aquello que lo provoca (sea una situación, una persona, un objeto, un animal, un pensamiento, etcétera). Así surgen las fobias, y como bien dice una extendida frase: el remedio termina siendo peor que la enfermedad.
Diferencia entre miedo, pánico y fobia
Saber discernir entre el miedo, el pánico y el desarrollo patológico de una fobia es importante para empezar a combatir aquello que nos inmoviliza. Partimos de la base de entender el miedo como uno de los sentimientos básicos de los seres humanos. Su existencia nos permite preservar la vida y ser cuidadosos, lo importante es enfrentarlo y establecer frente a las situaciones que nos atemorizan una acción sana.
El pánico es una respuesta fisiológica ante el temor. El cuerpo empieza a atravesar un cuadro de ansiedad que incluye aumento de la frecuencia cardíaca, dificultades para respirar, sudoración y dolor de cabeza, entre otros síntomas.
Por último, la fobia es un cuadro de percepción aterradora y desmedida frente a un fenómeno, pensamiento, persona, acción, objeto o actividad. Impide el correcto razonamiento y la actividad cotidiana, impidiendo enfrentar aquello que nos atemoriza y bloqueando nuestra vida.
¿Por qué surgen las fobias?
El surgimiento de las fobias es uno de los temas más discutidos por psicólogos, pacientes y seres queridos. Lo cierto es que buscar las causas en el pasado no ayuda a la resolución del problema, por eso uno de los enfoques más trabajados respecto de las fobias es el que centra su atención en resolverlas poco a poco.
El enfoque consiste en concentrarse en el problema, hallar una solución a través de estrategias específicas y breves, y luego desde allí explicar el problema. La fobia consiste en una construcción defensiva a partir de evitar determinadas situaciones, pero cuando el temor se convierte en un obstáculo para una vida tranquila, llega el momento de tratar las fobias y buscar el camino para superar aquellos temores irracionales que no nos dejan disfrutar plenamente nuestro día a día.
La terapia breve estratégica
Este es el nombre de una técnica para enfrentar las fobias. Se trata de una terapia enfocada exclusivamente en trabajar sobre las fobias y las obsesiones de los pacientes. Se busca exponer de forma paulatina al paciente a su fobia. Primero en un ambiente controlado, dedicando media hora del día a pensar en la peor fantasía relacionada con su fobia. Por ejemplo, el avión se cae.
El temor, enfrentado cara a cara, va mutando en coraje y valor para enfrentar las situaciones. De allí que aprendiendo lentamente a enfrentar el temor se convierta en un camino para la solución de la fobia.