Pero hacer frente a esta enfermedad es posible gracias a una buena y correcta alimentación, practicar ejercicio y llevar una vida sana en general. El pescado, especialmente el azul, es uno de los mejores alimentos para reducir el riesgo de desarrollar la diabetes del tipo 2. Entre los pescados azules que se pueden comer a diario está el bonito, la caballa, el atún o el salmón, que se encuentran durante todo el año en pescaderías de toda España.
La producción del aceite de ácido graso Omega 3, tan típico en los pescados azules, es realmente algo prioritario para mejorar la capacidad de la insulina de convertir la glucosa en energía, que es como actúa la diabetes. Estos aceites reducen el colesterol y ofrecen beneficios para cuidar del corazón.
Para preparar el pescado azul se puede hacer de muchas maneras, desde la plancha, al horno, al vapor y puede mezclarse con muchos otros ingredientes como verduras u hortalizas para ofrecer un círculo completo de dieta mediterránea que es vista y recomendada como una de las más saludables.
Para combatir la diabetes, lo hacemos desde diversas vertientes como la alimentación y la reducción de azúcar de las comidas. Va muy bien tomar diversas vitaminas como el calcio, el potasio, la fibra o las vitaminas de tipo A. También se recomiendan los cítricos, comer patatas, tomates, que además aporta otros nutrientes para la piel, además de los frutos secos como las nueces.
Concretamente para la diabetes tipo 2, y según la Asociación Americana de Diabetes no existe una cantidad de hidratos de carbono recomendada para su tratamiento, pudiéndose aumentar las cantidades de alimentos como pan, arroz, pasta o legumbres en personas que realizan ejercicio físico ya de manera habitual.