Muchas mujeres pasan horas en los gimnasios; van con frecuencia a los salones de belleza y clínicas; por no hablar de todos los rituales de belleza que siguen a diario en casa.
Todo esto, por supuesto, tiene su lado positivo. Todo el mundo debería hacer cuanto esté a su alcance para sentirse bien consigo mismo, aumentando más su autoestima. Sin embargo, esta búsqueda de más belleza, no debe excluir la preocupación de colocar en segundo plano su propia salud.
Muchos rituales de belleza pueden generar efectos adversos y, en algunos casos, ofrecer riesgos graves para la salud. Por estos motivos, en este artículo te mostramos una lista con algunos de estos hábitos que pueden ser perjudiciales:
1. Bronceado Artificial
El bronceado artificial, compuesto exclusivamente de los rayos UVA en una cantidad de energía altísima, es uno de los carcinógenos más peligrosos que existen. Los rayos UVA penetran más profundamente en la piel que los UVB y UVC y alteran las fibras de sustentación de la piel.
Diez minutos en una cámara de bronceado equivalen, en promedio, a una hora de sol sin protección.
Por lo tanto, los principales riesgos que el bronceado puede ofrecer son el cáncer de piel, envejecimiento prematuro de la piel y catarata.
2. Mantener el cabello siempre trenzado o con largas extensiones
Muchas mujeres mantienen su pelo constantemente presos en una cola de caballo o en trenzas (muy común, especialmente en las mujeres negras). Pero este hábito puede traer resultados negativos, así como el uso prolongado de extensiones ya que pueden causar calvicie y caída de cabello prematura.
Muchos expertos y médicos afirman que agregar estas extensiones añade mas tensión en los folículos del cuero cabelludo lo cual a su vez puede originar inflamación y a su vez una caída gradual del mismo. A este trastorno se le conoce alopecia por tracción.
3. Hacerse tatuajes
Actualmente, muchas personas ya tienen o están haciéndose tatuajes. Pero este es un procedimiento que puede proporcionar riesgos para la salud.
El principal riesgo de un tatuaje es de contraer la hepatitis B o C. Las personas con tatuajes tienen un riesgo significativamente mayor de ser portadores de la hepatitis C. La persona que decide hacerse un tatuaje, sin embargo, debe tomar algunas precauciones como asegurarse de que el sitio donde se realizara el procedimiento cuente con profesionales que utilicen equipamiento estéril y desechable.
4. Colocarse Botox
La aplicación de la toxina botulínica tipo A, conocido popularmente como "Botox" es bastante segura cuando se administra por profesionales debidamente capacitados. Un riesgo potencial es la caída de los párpados, dificultando la apertura de los ojos y afectando la asimetría facial, donde una mejilla se ve desigual que la del otro lado.
De este modo se refuerza la necesidad de buscar profesionales cualificados para llevar a cabo este procedimiento para evitar posibles problemas.
Ahora que ya conoces algunos rituales de belleza que pueden traer resultados negativos, algunos se deben evitar por completo; otros deben hacerse con moderación y siempre con orientación profesional. Después de todo, por cualquier resultado estético no vale la pena arriesgar tu salud.
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