Me preguntan muchas veces usuarios que visitan el blog dónde pueden adquirir catéteres doble J o incluso otros materiales médicos o quirúrgicos. De hecho, también muchos laboratorios se han puesto en contacto conmigo para ofrecer la venta de determinados productos a través de mi blog. Respecto a esto, quiero comentar que esta humilde web es sin ánimo de lucro y su única finalidad es contar mis vivencias y sobre todo intentar dar información fiable, apoyo y ayuda a aquellos que sufren patologías renales y comentar temas relacionados con la salud en general.
Partiendo de esta premisa, a través de esta web y sus redes sociales asociadas no se va a dar información de lugares o empresas que puedan vender productos médicos o quirúrgicos.
Esta web tiene visitas de infinidad de países (fundamentalmente de habla castellana) y el caso es distinto en cada uno de ellos. Concretamente en España, donde yo me encuentro, hay diferentes leyes que regulan la comercialización de medicamentos y productos sanitarios. Concretamente los sets de los catéteres doble jota solo deben ser comercializados a centros sanitarios (hospitales, sanatorios, centros de salud, etc.) y a profesionales sanitarios colegiados. Otra cosa es que se puedan conseguir… Como se suele decir… “el que la sigue la consigue”. De todas maneras, no es un producto que el paciente pueda hacer nada con él, ya que debe ser “colocado”, en caso de ser necesario, por el urólogo, con lo que no tiene mucho sentido el buscar comprarlo.
En España, nuestra querida y recortada Seguridad Social es la que se encarga de gestionar las compras de todo el material y todos los productos que están cubiertos en un tratamiento médico-quirúrgico. Cuando te prescriben o te van a colocar un catéter doble J, es la propia Seguridad Social la que gestiona la compra de todos los productos, utensilios, etc. En la sanidad privada española, tanto la de compañías aseguradoras como la de pago directo, es un caso similar, ya que es el propio hospital o profesional sanitario (urólogo) que te va a colocar el doble J el que se encarga de obtener estos suministros, con lo que son ellos los que contactan directamente con el proveedor, mayorista o distribuidor.
Comentar que sí que hay determinados productos (que van más allá de los medicamentos) que en España si se venden al (permitidme la expresión) “usuario final”, como todo tipo de productos ortopédicos, equipo para oxigenoterapia, aparatos de diagnóstico, utensilios de electromedicina, y un sinfín más de elementos.
Resumiendo, en circunstancias normales y bajo el parámetro de la sanidad pública o privada española el paciente se debe despreocupar por completo del material quirúrgico que va a ser empleado. Otro tema bien distinto que he averiguado por infinidad de correos electrónicos recibidos y comentarios en mi cuenta de Twitter es que hay mucha gente de países del otro lado del charco (Latinoamérica fundamentalmente) que me preguntan dónde comprar el catéter doble J. Se ve que es algo relativamente normal que en la sanidad privada de dichos países tengas que comprar tu directamente el kit del catéter doble jota y llevárselo al médico para que te lo coloque. Incluso en algún caso en la sanidad pública de estos países también se produce.
Lo importante es que cuando se nos coloque el doble jota sirva para solucionar los problemas, lo llevemos el mínimo tiempo posible y nos afecte lo mínimo.