No acumules en tu corazón anhelos de venganza, rezagos de mal. Arrójalos de ti, perdonando y olvidando el mal que te hicieron con palabras, obras y denigraciones, calumnias e injusticias. ¡Olvida! Únicamente tú saldrás ganando con tu perdón, porque habrás liberado tu corazón del peso de la amargura y el oídio. Sé inteligente: perdona y olvida y serás feliz..
No acumules en tu corazón anhelos de venganza, rezagos del mal. Arrójalos de ti, perdonando y olvidando el mal que te hicieron con palabras, obras y denigraciones, calumnias e injusticias. ¡Olvida! Únicamente tú saldrás ganando con tu perdón , porque habrás liberado tu corazón del peso de la amargura y el odio. Sé inteligente: perdona y olvida y serás feliz.
Si la sombra de los días grises perturba tu crecimiento, eleva el corazón a Dios, que está en tu interior. El triunfo lo obtenemos librando luchas dentro de nosotros. Si las penas maltratan el cuerpo, sirven para liberar el corazón. Y, una vez que hayamos triunfado, esparzamos el amor en todo los ambientes en que vivimos, porque es solamente amando que logramos vencernos a nosotros mismos.
