Los investigadores han descubierto que dormir un poco entre las sesiones de estudio puede hacer que sea más fácil recordar lo estudiado y ayuda a volver a aprender lo que se ha olvidado, incluso 6 meses después.
“Nuestros resultados sugieren que el sueño entrelazado entre las sesiones de práctica conduce a una doble ventaja, reduce el tiempo de volver a aprender y asegurar una mejor retención a largo plazo”, dijo la Dra. Stephanie Mazza de la Universidad de Lyon.
“Las investigaciones anteriores sugieren que dormir después de un aprendizaje es sin duda una buena estrategia, pero ahora nuestro estudio nos muestra que dormir entre dos sesiones mejora el aprendizaje.”
Mientras que los estudios anteriores han demostrado que tanto la práctica repetida y dormir pueden ayudar a mejorar la memoria, había poca investigación sobre cómo la repetición y el sueño influencia la memoria cuando se combinan.
En el estudio, Mazza y sus colegas plantearon la hipótesis de que el dormir entre las sesiones de estudio podría hacer que el proceso de reaprendizaje sea más eficiente, lo que reduce el esfuerzo necesario retener la información en la memoria.
Los resultados sugieren que alternar sesiones de estudio con el sueño podrían ser una manera fácil y eficaz para recordar información durante periodos de tiempo más largos con menos estudio, concluyó Mazza.
Fuente: Psychological Science,