GENERALIDADES SOBRE LOS HELMINTOS
Este término, no corresponde a una clasificación biológica, porque en realidad reúne dos grupos muy distintos de organismos metazoos con diferencias biológicas profundas. Los helmintos son un grupo de gusanos que la única característica que comparten, aparte de ser gusanos y ser invertebrados, es que son parásitos del hombre. Son en general, animales celomados de forma generalmente prolongada y simetría bilateral. Cuerpo blando, desprovisto de esqueleto y de patas articuladas.
Sistema nervioso ganglionar. Musculatura formada por una túnica muscular subcutánea que permite la reptación. A pesar de esto, podemos generalizar que los adultos son macroscópicos, alargados y presentan simetría bilateral, no poseen extremidades y afectan a miles de millones de humanos. Los tamaños de estos parásitos puede oscilar entre milímetros y metros, dependiendo de la especie.
Los nematodos son organismos evolutivamente mas "modernos" y presentan estructuras corporales mas avanzadas, por ejemplo, presentan un sistema digestivo completo con boca y ano y órganos internos aislados en un pseudoceloma, a diferencia de los platelmintos que no poseen ninguna de estas estructuras. En el caso de los cestodos, una clase de platelmintos, estos absorben directamente los nutrientes por su cubierta externa.
Los nematodos están cubiertos de una capa externa gruesa y protectora, similar en función a la epidermis humana, que se denomina cutícula.Los platelmintos por su parte, no poseen esta protección y tienen una capa mucho menos resistente (tegumento) que esta especializada en el intercambio de sustancias con el medio externo. La reproducción es otra de las grandes diferencias en estos dos grupos, mientras que el dimorfismo sexual es imperativo en todos los nematodos, en el caso de los platelmintos lo común es el hermafroditismo.
CLASE I: Anélidos
Sus caracteres pueden apreciarse en la lombriz de tierra. El cuerpo se compone de un buen número de anillos, segmentos o metámeros separados por estrangulaciones. Sus paredes constan de la piel, protegida por delicada cutícula y de la musculatura, formada por una capa subcutánea de fibras musculares circulares y otra interna de fibras musculares longitudinales, adecuadas para la reptación. La cavidad general o celoma está dividida por tabiques o septos transversos en tantas cámaras como anillos. El tubo digestivo atraviesa el animal de extremo a extremo, perforando los septos. El sistema nervioso se compone de una serie de ganglios dispuestos por pares en la región ventral del cuerpo, a derecha e izquierda de la línea media.
Los de cada par están relacionados por sendos nervios o comisuras transversas; los de cada lado por un nervio o cordón longitudinal. El sistema nervioso tiene, pues, la forma de una escalera de cuerda: los ganglios representan los nudos. Como la boca se abre en el plano ventral del cuerpo y el intestino está situado encima de la cadena nerviosa, el esófago necesita atravesar este sistema y, en efecto, pasa entre dos pares de ganglios. Estos, con sus correspondientes comisuras y nervios longitudinales, forman alrededor del esófago un anillo llamado collar esofágico. Esta particularidad permite distinguir en el sistema nervioso de los Anélidos dos regiones: la anteesofágica o supraesofágica, situada en la cabeza, y la postesofágica o infraintestinal.
La primera está formada generalmente por un solo par de ganglios, llamados ganglios cerebroides. Sus órganos sensoriales, son palpos para el tacto; ocelos para la visión, y estatocistos vesiculares para el equilibrio. Todos ellos están situados en general en la cabeza. El sistema circulatorio se compone de dos vasos longitudinales, uno dorsal contráctil, que hace de corazón, y otro ventral, unidos por arcos vasculares segmentarios (uno por un segmento).
De gran interés es en los anélidos el aparato excretor o renal: en cada segmento hay un par de órganos excretores llamados nefridios u órganos segmentarios, constituidos por sendos tubos que se abren por un extremos a los lados del cuerpo y por el otro en la cavidad general y expulsan al exterior los productos de la desasimilación. A veces se utilizan también para la expulsión al exterior los productos de la desasimilación y también para la expulsión de las células sexuales.
Los anélidos se reproducen sexualmente y en general con metamorfosis. Del huevo sale una larva libre de forma de peonza, llamada trocófora, que nada mediante unas coronas de pestañas vibrátiles y tiene la constitución de un metámero del animal adulto: posee un par de ganglios nerviosos y un par de nefridios. Los demás segmentos se forman por gemación en el polo inferior o anal de la larva. Muchos anélidos, entre ellos la lombriz de tierra, tienen un enorme poder de regeneración, por lo cual pueden partirse transversalmente en varios trozos con la seguridad de que cada trozo originará un gusano entero. La mayor parte de los anélidos viven en el mar; algunos en las aguas dulces, como la sanguijuela; otros en la tierra húmeda, como la lombriz terrestre.
CLASE II: Platelmintos
Gusanos de cuerpo aplanado dorsoventralmente, desprovisto de apéndices, y con la cavidad general rellena por un parénquima de tejido conjuntivo cruzado por fibras musculares. El tubo digestivo falta o, cuando existe, carece de ano. El aparato excretor se compone de tubos nefridianos ramificados. Casi todos son hermafroditas y parásitos. Se clasifican en tres órdenes muy diferentes, pero relacionados.
Orden 1º: Cestodos
Comprende a las tenias o solitarias, animales segmentados, de cuerpo acintado, que viven parásitos en el interior de otros animales y carecen totalmente de tubo digestivo. Una tenia se compone de un metámero asexual, llamado cabeza o escolex, dotado de órganos fijadores (ventosas o ganchos), con los que se agarra a las paredes intestinales, y de una cadena de metámeros sexuales o proglotis. Estos nacen de aquél por gemación y pueden destacarse del conjunto al alcanzar la madurez reproductora, saliendo, cargados de huevos, con las heces fecales.
Se llaman entonces cucurbitinos. Los proglotis son hermafroditas y producen una infinidad de huevos cada uno. Los huevos salen ya incubados y contienen un embrión hexacanto provisto de tres pares de ganchos llamados oncosfera. Cuando uno de estos huevos es ingerido por un animal adecuado (los de Taenia Solium por el cerdo; los de Taenia saginata por el ganado vacuno), el embrión queda libre en el intestino, perfora su pared, y por el torrente circulatorio va a los músculos, donde se enquista y se transforma en cisticerco. El cisticerco es una vesícula con el escolex de la futura tenia invaginado en su interior.
Cuando el hombre ingiere un cisticerco, el escolex se libera en el intestino, se fija a sus paredes, y proliferando, origina una seria de proglotidos. T. solium mide tres metros y medio y T. saginata, de siete a ocho; Dibothriocephalus latus (la mayor tenia conocida) hasta quince, con 4,000 proglotis. El cisticerco de esta última vive en peces de agua dulce. Además de estas solitarias posee el hombre los cisticercos de algunas otras cuyos adultos viven en el intestino de otros animales. La más notable de éstas es la T. equinococcus, insignificante tenia (cinco milímetros como máximo) del intestino del perro, cuyo cisticerco se desarrolla de preferencia en el hígado humano, alcanzando enormes dimensiones y produciendo el quiste hidatídico (Hidatidosis humana).
Orden 2º: Trematodos
Gusanos insegmentados, de cuerpo foliáceo, que viven parásitos sobre o en el interior de otros animales y poseen un tubo digestivo sin ano, pero ramificado en ciegos. Para agarrarse al huésped poseen dos o más ventosas y a veces ganchos córneos. Casi sin excepción son hermafroditas. El más importante de todos es la duela del hígado (Distomum hepaticum o Fasciola hepatica), que en estado adulto vive en el hígado de los carneros y tiene un complicado y curioso desarrollo.
Orden 3º: Turbelarios o planarias
Gusanos parecidos por su forma y por tener intestino ciego, a los Trematodos, pero difiriendo de ellos por ser libres, carecer de órganos fijadores y tener el cuerpo cubierto de pestañas vibrátiles. Abundan en el mar, muchos viven en las aguas dulces, y algunos se encuentran en la tierra húmeda de las regiones tropicales. Entre los tres Órdenes de gusanos Platelmintos hay una relación filogenética. Los Turbelarios representan las formas primitivas. Los Trematodos pueden considerarse como planarias parásitas que han diferenciado órganos fijadores y han perdido las pestañas vibrátiles. Los Cestodos son Trematodos de más pronunciado parasitismo. Pierden el tubo digestivo y multiplican el aparato reproductor, fenómeno éste seguido de la segmentación del cuerpo.
CLASE III: Nematelmintos
Gusanos de cuerpo cilíndrico o filiforme, liso, cubierto por una cutícula quitinosa, e insegmentado; con la cavidad general libre y continua, y el intestino provisto de boca y ano. El aparato excretor está formando por dos sencillos tubos longitudinales que convergen en un orificio excretor común. Casi todos son unisexuales y parásitos, determinando muchos de ellos peligrosas enfermedades. Los más interesantes son la lombriz intestinal, las lombrices blancas y la triquina. La lombriz intestinal (Ascaris lumbricoides) tiene de 20 a 30 centímetros de longitud y habita el intestino delgado. Las hembras ponen infinidad de huevos (hasta 64 millones), que salen con las heces fecales y se convierten en embriones en un par de meses. El hombre los ingiere con verduras crudas regadas con aguas fecales.
Las lombrices blancas (Oxyuris vermicularis) de 1 centímetro de longitud, viven en el intestino grueso en enormes cantidades y al emigrar al recto producen en éste una molesta comezón. Las hembras ponen los huevos ya incubados por lo cual son susceptibles de infeccionarnos poco después de salir del cuerpo. Ambas lombrices se alimentan exclusivamente del contenido intestinal. La triquina (Trichinella o Trichina spiralis) es un gusanito de 1 milímetro de longitud que se encuentra, a veces, en los músculos del cerdo, arrollado en espiral dentro de un quiste calizo. Si el hombre (u otro animal) ingiere carne triquinada, las cápsulas se disolverán en el estómago y las triquinas pasarán al intestino.
Las hembras, una vez fecundadas, penetran en la pared intestinal y paren, cada una 1,500 larvas. Estas emigran a la sangre y, difundiéndose por el organismo, penetran en los músculos, donde se enquistan. La infección de triquinas provoca en el hombre graves síntomas (triquinosis) y, a veces, la muerte. El cerdo adquiere la triquina comiendo ratas infeccionadas o deyecciones. También merece mención el Ancylostomum duodenale, gusano de 2 cm. de longitud que habita en el duodeno, nutriéndose de sangre y determinando graves hemorragias que ocasionan una anemia llamada clorosis de Egipto y anemia perniciosa de los mineros. Sus larvas se desarrollan en la tierra húmeda, por lo cual están expuestos a contraerla los alfareros y mineros.
anisakiasis, anisakiosis o anisakidosis (CIE 10 - B 8.1)
Es causada por la ingestión de larvas de nemátodos de la familia Anisakidae, al comer pescado de mar crudo o en diferentes alimentos de origen marino como el sushi o el ceviche. En algunos casos se conoce la forma no invasiva, en la cual los parásitos se sienten en la garganta o esófago y son generalmente eliminados con esfuerzos de tos. La forma invasiva sucede cuando las lanas penetran la pared del estómago o intestino y ocasionalmente ganglios linfáticos y otras vísceras. La sintomatología es muy inespecífica, con dolor abdominal, vómito, diarrea, etc.
La mayoría son diagnosticados erróneamente y el diagnóstico correcto sólo se hace al encontrar las larvas por endoscopia o durante la cirugía. Las larvas pertenecen a los géneros Anisakis, Pseudoterranova o Contracaecum, con morfología similar y tamaño entre 1 y 5 cm de longitud. La curación se obtiene al extraer los parásitos por endoscopia o por cirugía. Se han descrito casos, principalmente en países del Lejano Oriente, aunque también se conocen en Europa, Estados Unidos y Chile. Siempre que exista la costumbre de comer pescado crudo, habrá la posibilidad de sufrir anisakiosis.
Es una infección producida por la larva del nematodo Anisakis simplex (también se relaciona con los nematodos Anisakis spp., Contracaecum osculatum, Pseudoterranova decipiens y Phocanema spp.). Una revisión realizada en el año 1993 había revelado 11629 casos de anisakidosis. En América Latina la infección humana por esos nematodos fue descrita en Chile, Perú y Brasil. En Perú se describieron ocho casos; sin embargo, solo cinco de ellos fueron confirmados. En Chile se describieron cuatro casos, pero el parásito se recuperó en solo tres de los pacientes. Dos de los casos fueron causados por Pseudoterranova decipiens y afectaron la mucosa gástrica. Más recientemente, se describieron en Chile los aspectos parasitológicos y clínicos de siete nuevos casos causados por la larva de P. decipiens.
La anisakidosis es una enfermedad del tracto gastrointestinal que puede presentar síntomas muy variables, desde náuseas hasta fuertes dolores abdominales. La patología se presenta con un cuadro clínico de dos tipos. En el síndrome gástrico agudo, sobreviene un fuerte cólico epigástrico, con náuseas y vómitos que se presentan 4 a 6 horas después de la ingestión del pescado infectado. Algunas veces se requiere una intervención quirúrgica, en otros casos la evolución puede ser de hasta 2 años. Cuando se afecta el intestino delgado, ocurre la aparición brusca de náuseas, vómitos, cólicos y fiebre; todo esto en unos 7 días después de la ingestión de las larvas. Adicionalmente, se pueden presentar cuadros alérgicos (anafilaxia), caracterizados por urticaria, angioedema, angioedema facial (hinchazón del rostro), sintomatología gastrointestinal, respiratoria (edema de glotis, broncoconstricción); y, en casos más severos, choque anafiláctico.
Los anisakideos adultos son parásitos de mamíferos acuáticos: ballenas, delfines, marsopas, focas, leones marinos. El ciclo vital exige dos hospedadores intermediarios. El primero de ellos son los crustáceos Euphasideos, que son ingeridos por el segundo hospedador intermediario (peces, cefalópodos). Varias especies pueden participar en esta etapa, dentro de las cuales cabe mencionar: arenque (Clupea harengus), bacalao (Gadus spp.), caballa (Scomber spp.), salmón (Oncorhynchus spp.), mero (Epinephalidae), calamar y muchas otras. En América Latina varias especies de pescado han sido descritas como parasitadas por Anisakideos, dentro de ellas: jurel (Trachurus murphyi) y merluza (Merluccius hubbsi) en Argentina y en Chile y Perú (Merluccius gayi), corvina (Sciaena deliciosa) en Perú, caballa (Scomber scombrus), anchoa (Pomatomus saltatrix), pez sable (Trichiurus lepturus), pargo (Pagrus pagrus) en Brasil. Eventualmente este segundo hospedador intermediario puede ser consumido por otro pez o cefalópodo, en los que también se enquistará la larva del Anisakideo. Cuando un mamífero marino ingiere algún pez o cefalópodo infectado, el ciclo biológico se completa con el desarrollo en el tubo digestivo de aquel.
El hombre actúa como hospedador intermediario de manera accidental, cuando consume la larva infectante enquistada en los tejidos de peces o cefalópodos. Una vez más, la infección es causada por la ingestión de pescado crudo, mal cocido o inadecuadamente salado, ahumado o marinado. El diagnóstico clínico se basa en la anamnesis (historia del paciente) donde recalca el consumo de pescado crudo y en el cuadro clínico con examen endoscópico. Los exámenes serológicos no son concluyentes. El tratamiento para la mayor parte de las infecciones es la remoción quirúrgica de los parásitos.
"SOMOS LO QUE HACEMOS REPETIDAMENTE. EXCELENCIA, POR LO TANTO, NO ES UN ACTO SINO UN HABITO" - ARISTOTELES