Las comidas afrodisíacas, sobre todo las cenas afrodisíacas, existen desde tiempos inmemorables. En muchas culturas y civilizaciones se han utilizado alimentos y bebidas para aumentar el apetito sexual.
El ambiente afrodisíaco
Crear un ambiente especial ayuda a relajar y a despertar los sentidos. Es aconsejable perfumar nuestra casa sutilmente con aceites esenciales o velas de canela, miel, vainilla, azahar, jazmín, rosas o Ylang ylang. Utiliza aceites naturales y ponlos en un difusor con un poco de agua, ya que el aroma tiene que ser sutil, sino podríamos causar jaqueca o sensaciones molestas, algo que hay que evitar.
La iluminación debe ser adecuada para poder ver, pero no excesivamente iluminada ni tampoco lúgubre.
Utiliza velas, enciende luces indirectas (sobremesa, paredes…) en vez de luces directas del techo. En ningún caso encender luces frías, tipo tbos fluorescentes, ya que nos daría más la sensación de estar en la consulta del médico o en el pasillo del supermercado que en un momento de intimidad.
Bebidas afrodisíacas para despertar los sentidos
El ambiente ya nos transporta a una situación diferente, aunque llevemos muchos años con nuestra pareja, sentirás que los nervios afloran. Una forma de calmarlos y de prepararnos en ingerir o comer, ya el nerviosismo produce salivación.
Además la boca y los genitales están conectados, por lo cual si relajamos nuestra boca, lengua y músculos maxilares se relajan también nuestros genitales y otras zonas erógenas.
La gran mayoría incorporamos en esta etapa algo de alcohol. Te invito a que proveemos algo diferente esta vez, y evitemos el consumo de bebidas alcohólicas para disfrutar al 100 % de todos nuestros sentidos.
Té frío o tibio: Mezcla té verde (Sencha preferentemente), cascaras de naranja o mandarina, pétalos de rosa, hibisco y jazmín. El té verde tienes que infusionarlo por un máximo de 3 min, sino te quedará muy ácido. Puedes endulzarlo con miel o azúcar morena.
Té moruno: se trata de té verde con menta fresca (se bebe bien caliente).
Zumo Maracuya, chirimoya o guayaba: Estos frutos están muy ligados a tratamientos de fertilidad, y a combatir los efectos de la menopausia, son ideales para mujeres. Desde tiempos inmemorables se consideran frutas afrodisíacas para mujeres.
Puedes agregarle Guaraná, Maca o Ginseng en polvo a cualquier zumo de frutas, son estimulantes naturales y además ayudan a prevenir problemas de erección.
Ten cuidado con los niveles de azúcar que agregues en zumos o tés, ya que un exceso nos provocará a lo largo de la noche mucha sed.
El baño
Compartir un buen baño o ducha es una manera relajante y purificadora de empezar cualquier velada. Te recomiendo que emplees jabones naturales de miel o almendras, y que finalices el ritual con un rápido y amoroso masaje de aceite de canela, rosa o crema de cacao.
Para esto último vamos a aplicar el aceite sobre la piel húmeda, y calentar bien ambas manos, con una rápida fricción entre las dos, antes de frotar el cuerpo de tu amante.
No te apliques perfumes ni colonias con aromas artificiales o alcohol después del baño, ya que ocultamos aromas naturales de nuestro cuerpo, claves y primordiales para la atracción física mútua.
Comidas afrodisíacas
No existen en sí las recetas afrodisíacas 100%, pero sí existen ingredientes, los cuales puedes utilizar con tu imaginación para preparar deliciosos platos que sean además comidas afrodisíacas. Te recomiendo que preparéis juntos una serie de platillos frescos, sanos y rápidos de elaborar combinando y/o utilizando estos ingredientes:
Especias: Anis, Albahaca, Azafrán, Hinojo, Eneldo, Jengibre, Chile, Canela, Comino, Cúrcuma o Pimienta.
Alimentos: Mariscos, pescados, Quesos frescos o Tofu
Verduras y hierbas frescas: Menta, albahaca, rúcula, Jengibre, espárragos, cebolletas, ciboulette, lechuga, pétalos de flores comestibles , Apio, Hinojo, pepino o rábano.
Frutas y frutos secos: Higos, Chirimoya, Papaya, piña, Maracuya, Guayaba, Fresas, Frambuesas, Melón, Platano, Platano macho(para freír) o aguacate.
Condimentar: miel, agua de azahar, agua de rosas, mermelada de naranja amarga, aceto balsámico, sal de mar y azúcar moreno o panela.
En tu menu, crea platos sencillos pero juega y combina con las variantes de sabor. Recuerda siempre que la boca y los genitales están conectados. Mientras más experiencias de sabores tengas, más experiencias de sensaciones.
Combina elementos ácidos con dulces y después amargos, ej. un ceviche de salmón acompañado de una ensalada de rúcula con aceto balsámico y mermelada de naranja.
¡Cuéntanos tus recetas en los comentarios!
Este post es autoría de Ecocosas puedes ver la entrada original en
Fuente: este post proviene de Blog de ecocosas, donde puedes consultar el contenido original.
¿Vulnera este post tus derechos? Pincha aquí.
Creado: