La artrosis cervical o cervicoartrosis se produce cuando se lesiona o degenera el cartílago de las articulaciones de la columna cervical. La artrosis cervical es muy frecuente en personas mayores a 50 años.
En su diagnóstico se tiene en cuenta los síntomas que presenta el paciente, los más frecuentes son: dolor, limitación del movimiento y rigidez. También puede aparecer: dolores de cabeza, debilidad muscular con sensación de adormecimiento en brazos, hombros, manos y dedos, hormigueos, pérdida de fuerza, pérdida de equilibrio.
En algunas ocasiones, la cervicoartrosis es asintomática y se diagnostica como un hallazgo al realizar radiografías de la columna cervical por otro motivo.
El tratamiento disponible suele ser medidas físicas, fármacos y cirugía. Los fármacos suelen ser: antiinflamatorios y analgésicos, y a veces, relajantes musculares.
En un hospital de Santiago de Cuba, la artrosis cervical era uno de los principales motivos de consulta médica, y los tratamientos convencionales no siempre resolvían el problema, así que decidieron ver si la Reflexología era efectiva en esta dolencia, y efectivamente, probó que era eficaz, más rápida y sin efectos secundarios.
En el siguiente vídeo explico cómo se llevó a cabo este estudio, los resultados y las conclusiones.