Poco a poco, iremos progresando. Cogiendo velocidad. Desarrollando nuevas habilidades que nos permitirán disfrutar más de este deporte. Para hacerlo sin riesgos, es fundamental prestar atención a la vestimenta. Utilizar ropa térmica es básico para sentirnos cómodos y no pasar frío que nos impida la práctica normal de esquí.
Otro aspecto a vigilar es la protección solar. Especialmente en el rostro. Aunque estemos cubiertos por casco y otros elementos, parte de la cara quedará expuesta. Por tanto, será necesario utilizar crema solar en esta zona, y renovarla en sucesivas ocasiones. Por ejemplo, puedes aprovechar los telesillas para volver a aplicar una cantidad generosa en el rostro.
Otros elementos de protección en el esquí
El casco sólo es obligatorio en Italia y en Austria. Independientemente de que la normativa cambie con el tiempo, lo mejor es llevarlo. Es un elemento protector que, además, nos cubrirá la parte superior de la cabeza, con lo que también ayudará a prevenir los efectos de las bajas temperaturas.Con este mismo objetivo, tenemos los guantes. Seguro que en alguna ocasión has jugado en la nieve a tirar bolas. Si lo has hecho con niños pequeños, es probable que los hayas visto llorar después de lanzar varias bolas de nieve. El efecto del frío en las manos puede tardar en llegar. Pero llegará. Es indispensable tener guantes de esquí. Y no sólo por el frío. Imaginemos que vas a parar para tomar un refrigerio en alguna zona habilitada en pistas. O vas al baño. En estas áreas hay habilitadas unas zonas para dejar los esquís. Cualquier momento para recoger o dejar los esquís te hará notar la necesidad de llevar guantes. Son elementos que en sus partes delantera o trasera son más finos. Sin guantes, además de pasar frío en las manos, sentirás cierta incomodidad al llevar los esquís de un lado a otro. Es por eso que te resultarán fundamentales para la práctica de este deporte.
Más seguros, aún
Los anteriores elementos nos aportarán prevención frente a accidentes e incomodidades derivadas del frío. Ya estamos preparados para disfrutar de este maravilloso deporte. Independientemente del nivel que tengamos, en las pistas nos encontraremos con otros esquiadores. O imprevistos en la pista por una zona de desniveles, calidad de la nieve, Para estar completamente tranquilos es recomendable también utilizar un seguro de ski.¿En qué deberías fijarte? Lo primordial es encontrar una buena combinación de precio que sea capaz de responder a tus necesidades como esquiador. Algunas opciones interesantes presentan la posibilidad de estar cubierto durante todo el año y en cualquier pista del mundo. Algunas pólizas incluyen opciones de cobertura ante eventuales cancelaciones, pérdidas o deterioro de equipaje, etc. Sin duda, una fórmula más que conveniente para conseguir máxima seguridad y un disfrute total cuando vamos a esquiar.