Entrena con pulsometros

En la actualidad, el pulsómetro es una tecnología casi habitual en la práctica deportiva, y tiene numerosas ventajas a la hora de hacer un seguimiento de nuestro propio rendimiento y el comportamiento de nuestro organismo. La persona que entrena con pulsometro puede hacer un seguimiento objetivo de variables que sirven para marcar avances y retrocesos en el proceso de entrenamiento y fortalecimiento corporal. Por eso, hoy analizaremos cuales son ls principales ventajas del entrenamiento con pulsometros, cómo sacarles el máximo provecho y qué tipo de información podemos registrar y comparar para entender y mejorar nuestro rendimiento y optimizar la práctica deportiva general de nuestro día a día.

Registrar el esfuerzo objetivamente

En la comunidad ilovefit, donde se reúnen toda clase de contenidos centrados en el mundo del fitness y el cuidado corporal, los entrenamientos con pulsometros son una excelente herramienta porque permiten hacer una medición y registro objetivo del esfuerzo que realizamos para cumplimentar una rutina de ejercicios. Además, podemos hacer un seguimiento sencillo de nuestro estado de salud cardiovascular, muy importante para garantizar rutinas que no excedan nuestra capacidad, pero tampoco que estén por debajo de nuestro potencial.

Ayudan al diseño de esquemas de entrenamiento personalizados

Si realizamos una prueba de esfuerzo previa y conocemos el límite de nuestra capacidad cardiovascular, podemos diseñar esquemas de trabajo y entrenamiento que ayuden a ir mejorando poco a poco el rendimiento general. El pulsometro es una excelente herramienta a la hora de de adaptar los entrenamientos a los valores de nuestro organismo, controlar la experiencia y adaptar los esfuerzos a cada una de las fases programadas en el entrenamiento.

Reduce los tiempos para obtener mejores resultados de entrenamiento

El pulsometro te ayuda a registrar el rendimiento en tus diferentes jornadas de entrenamiento, ya que si no tenemos datos del ritmo en el que entrenamos, puede que hayamos perdido jornadas por no llevar al límite nuestro cuerpo, o incluso cometer errores de exceso y lesionarnos. El pulsometro ayuda a sacarle el máximo provecho a cada salida a entrenar, exprimiendo al máximo las zonas de esfuerzo y las zonas anaeróbicas de cada jornada de entrenamiento.

Además, al conocer tus límites y ritmos de entrenamiento, reduces la cantidad de lesiones. Se trata de conocer más a fondo tu propio cuerpo y la capacidad y rendimiento que puedes tener en tus entrenamientos, así que un pulsometro siempre suma a la hora de seguir mejorando tu práctica deportiva.

Motivador para la autosuperación

Otro de los beneficios de incorporar el uso de un pulsometro en tu entrenamiento, es que motiva a seguir mejorando tus propias marcas. Es muy común que en los entrenamientos prolongados nos quedemos cómodamente con un ritmo más reducido que el que deberíamos. El pulsometro es el dispositivo que se encargará de indicarnos si estamos o no dentro de la zona de esfuerzo requerida, y de esta forma veremos si hay que aumentar o no la intensidad del pedaleo.

Incluso en recorridos conocidos, con un pulsometro puedes darle una nueva entidad al entrenamiento y al recorrido que haces con tu bici, sacando el máximo esfuerzo necesario para cada espacio.