Un nutricionista es un profesional especializado en construir hábitos de alimentación que mejoren tu salud y te ayuden a prevenir enfermedades. Entre sus tareas, está la de aconsejar planes de alimentación que cumplan los requisitos nutricionales adecuados para cada persona, en función de su estado de salud y su condición física. Son encargados de educar nuestra forma de comer, con la finalidad de maximizar nuestro estado de salud.
Comer es un hábito que tenemos todos y el que más veces realizamos al día, algo que, aún sin ser conscientes, está condicionando y esculpiendo nuestra salud actual y la futura. Es posible que pienses que “comer” sabemos todos, pero no es lo mismo comer que alimentarse. Entonces, ¿en algún momento has prestado atención a este asunto para hacerlo de forma correcta? Seguro que ahora estás dándole vueltas a esto.
Existe un gran desconocimiento hacia esta profesión, y a raíz de falsas creencias es habitual que la figura del nutricionista se relacione únicamente con querer bajar de peso, personas con intolerancias alimentarias, o para aquellas que necesiten una dieta específica, como puede ser el de los deportistas. Además, existe el miedo generalizado de creer que si se recurre a esta ayuda se pautarán dietas muy estrictas, cerradas y limitadas, se asocia con pasar hambre y ansiedad, y con la prohibición de todos aquellos alimentos que nos hace felices. Por ello, si de entrada ya tenemos estas ideas preconcebidas, lo fácil es no hacer nada, seguir el ritmo como hasta ahora, sea positivo o no.
La realidad es que estos profesionales pueden ofrecerte la información, el asesoramiento y la educación que necesitas para tener una alimentación completa, saludable, segura y variada, para ti y toda tu familia, con el objetivo de mejorar vuestra calidad de vida, prevenir enfermedades, reducir riesgos, y controlar afecciones patológicas relacionadas con el consumo de alimentos.
¿Cuándo puede ayudarte un nutricionista?
Ante problemas médicos
Diabetes, hipertensión, colesterol, intolerancias, alergias… te ayudarán a comer con seguridad sin tener que sacrificar el sentido del gusto.
Problemas digestivos comunes.
Estreñimiento, acidez, gases, reflujo… el especialista te dará la clave para escoger de forma adecuada los alimentos más adecuados para tu bienestar.
En la adolescencia
Ante los cambios hormonales y físicos que suceden en este periodo, es aconsejable acudir a un experto en nutrición para enseñarles a comer y prevenir trastornos alimentarios que puedan ocasionar problemas de sobrepeso, anorexia o bulimia.
Durante el embarazo y la lactancia.
Una correcta alimentación ayudará a que la mujer pueda transimitir los nutrientes necesarios durante la gestación, reduciendo riesgos que provoquen defectos en el feto. Posteriormente, en la lactancia, la madre debe aportar a través de la leche ciertas vitaminas, y puede hacerlo comiendo de forma correcta.
Si eres deportista.
Un plan nutricional especifico según el esfuerzo que realizas en la modalidad deportiva que hayas escogido, te ayudará a conseguir mejores resultados.
Ante la decisión de perder peso.
Los planes para restringir calorías y bajar de peso es, como ya hemos contado antes, la razón más frecuente para acudir a un dietista.
En la vejez.
Las personas mayores experimentan cambios en su organismo que reducen la apetencia y dificultan la experiencia de comer, por tanto, tener una dieta adaptada en cada caso, ayudará a tener una mejor relación con la comida y sentirse mejor.
Ahora que conoces mucho mejor el papel de un nutricionista ¿Crees que necesitas ponerte en manos de un experto? En los centros de Lev® contamos con un equipo de profesionales especializados que están deseando ayudarte. ¡Pide ya tu cita aquí mismo!