Según los especialistas, las enfermedades alérgicas son unas de las afecciones crónicas más comunes a nivel mundial. Quienes poseen antecedentes familiares alérgicos, son más propensos a padecer estas patologías. Las más comunes son el asma, urticaria, rinitis alérgica y eccema.
Dichas enfermedades, por lo general pueden ser aliviadas temporalmente mediante el empleo de fármacos. Sin embargo, existen procedimientos empleados actualmente para curar ciertas alergias.
De este tema, que afecta a gran cantidad de personas de todas las edades les hablaré a solicitud de Tisha, una seguidora de Arkansas. Ella es una joven, que trabaja como ayudante en una pequeña carpintería familiar. Se especializan en cierto tipo de restauraciones, que la mayoría de las carpinterías evitan.
Generalmente, ella y sus compañeras logran devolver la funcionalidad a ciertos muebles antiguos, una labor altamente apreciada por sus clientes.
Tisha me comenta, que durante el tiempo que tiene trabajando en este lugar ha experimentado ciertas afecciones de origen alérgico. La mayoría de las veces ha sido por el empleo de ciertos productos utilizados para el sellado de la madera. Las reacciones que ha experimentado son ardor en los ojos e irritación en la garganta.
Ella me comentaba, que tan pronto se aleja del lugar donde se está empleando el producto, cesan las molestias. Po ello, decidió no acudir a ninguna consulta médica. No obstante, quiso asesorarse conmigo a los fines de que le instruyera en alguna forma natural para contrarrestar las alergias.
Al comprender su situación, le preparé rápidamente un material donde incluí las generalidades acerca de los procesos alérgicos. Además de ello le comenté sobre la inmunoterapia, una estrategia empleada actualmente para curar ciertas afecciones alérgicas.
Dado que, los procesos alérgicos son frecuentes en todo tiempo y lugar, consideré importante compartir esta información en mi blog.
Generalidades acerca de los procesos alérgicos
De acuerdo a lo investigado hasta ahora, las alergias se producen por reacciones exageradas del sistema inmunológico. Actualmente, se ha producido un incremento de las enfermedades alérgicas, siendo uno de los procesos responsables la crisis climática global. Hoy día, una de cada cuatro personas que padece algún trastorno alérgico crónico, prácticamente aprenden a convivir con ellos.
No obstante, en ciertas ocasiones pueden llegar a desencadenar efectos de alta peligrosidad. Por lo general, dichas reacciones ocurren frente a ciertas sustancias denominadas alérgenos.
A manera de ejemplo, destacan el polen y ciertos alimentos. Se ha observado, que muchas veces los síntomas suelen ser leves. Sin embargo, existe una importante cantidad de casos en que la sintomatología puede producir profundos impactos en diversas actividades rutinarias.
Existen en la actualidad, ciertas opciones farmacológicas para el tratamiento sintomático de las alergias (broncodilatadores, antihistamínicos y corticoides). Dentro de los alérgenos más comunes destacan:
Ciertos alimentos (cacahuete, cereales con gluten, ostras, langostas, huevos)
Algunos fármacos (penicilina y sus derivados , anticonvulsivos, sulfamidas)
Ácaros del polvo
Polen
Alérgenos de contacto (residuos de metales, polvo, resinas, barnices, polvillo de madera, colorantes, formaldehido)
Animales de granja y mascotas (alérgenos en saliva, pelaje, orina y caspa)
Compuestos venenosos provenientes de las picaduras de ciertos insectos (pulgas abejas, avispas y hormigas) y de algunos arácnidos (garrapatas, arañas, ácaros y escorpiones)
Esporas e hifas de hongos y moho (mal llamada alergia a la humedad)
Fragancias y olores generados por productos químicos de uso doméstico o industrial.
Las zonas más comúnmente afectadas por las reacciones alérgicas son las vías respiratorias, sistemas digestivo y cardiovascular, además de la piel. Así, algunos alimentos pueden ocasionar picor e inflamación a nivel de la boca. A su vez, el tracto superior del sistema respiratorio es el lugar donde inciden los diversos tipos de polen, produciendo estornudos y goteo nasal.
Síntomas más comunes de las reacciones alérgicas
Por lo general, los síntomas de alergia se presentan casi inmediatamente después del contacto del alérgeno con los órganos mencionados. Sin embargo, se han reportado ciertas situaciones en las cuales la sintomatología puede demorar horas o días antes de aparecer.
En ocasiones, algunos procesos alérgicos son llamadas también hipersensibilidades. Aún cuando muchas de ellas distan de ser consideradas como alergias. A manera de ejemplo podemos mencionar intolerancias o hipersensibilidades alimentarias. Es fácil llegar a confundirse, porque los síntomas son muy parecidos al de las reacciones alérgicas.
Dentro de las intolerancias más reconocidas destacan intolerancia a la lactosa, gluten, fructosa y sacarosa.
Entre los síntomas que suelen presentarse de forma más recurrente tenemos:
Goteo nasal, tos y estornudos
Picor, enrojecimiento y lagrimeo de los ojos (conjuntivitis)
Problemas respiratorios (tos, opresión a nivel pectoral y sibilancias, que son sonidos agudos presentes al respirar )
Erupciones cutáneas (incluye sarpullido o urticaria)
Sequedad y enrojecimiento de la piel
Inflamación y picor a nivel de lengua y labios
Afecciones a nivel gastrointestinal (náuseas, vómitos, dolor abdominal y procesos diarreicos)
Inflamación en ciertas mucosas.
Existen algunos síntomas menos frecuentes, que ocurren frente a ciertos desencadenantes como alimentos u otros agentes que causan alergias. Dichos síntomas se enmarcan dentro de lo conocido como reacciones alérgicas graves o shock anafiláctico, que afectan todo nuestro organismo.
Por lo general, los efectos se presentan a los pocos minutos de exposición frente al alérgeno. Dentro de ellos podemos mencionar:
Dificultades respiratorias
Cianosis (presencia de coloración azulada en la piel y los labios)
Inflamación a nivel de boca y garganta
Presencia de confusión y colapso
Pérdida de conocimiento.
Según la ciencia, ciertas reacciones alérgicas frecuentes como la fiebre del heno, asma y urticaria se asocian con un anticuerpo producido por nuestro organismo denominado inmunoglobulina E (IgE).
Hablando acerca de la inmunoterapia
Diversos especialistas, han propuesto emplear el término inmunoterapia antialérgica (ITA) para señalar ciertas terapias que buscan inducir la tolerancia inmunológica. Principalmente sobre diversos alérgenos.
Según los registros, hace unos doscientos años que se comenzó a conocer acerca de las enfermedades alérgicas, especialmente las respiratorias. A su vez, la metodología general para el empleo de la ITA se concretó hace más de cien años. De hecho, los fundamentos del arte y ciencia de la ITA se han perfeccionado durante este tiempo.
Ello le ha permitido alcanzar ciertas bases sólidas, tanto clínicas como inmunológicas. Incluso, es considerado hasta el momento, el único tratamiento eficaz con capacidad de modificar las patologías alérgicas.
De acuerdo a la ciencia, la inmunoterapia o vacunas contra la alergia logran reestablecer el equilibrio del sistema inmunitario. Este efecto permite desarrollar tolerancia a diversos compuestos frente a los que se producen reacciones alérgicas. Básicamente consiste en administrar en el paciente alérgico ciertas dosis de extractos, que contienen una o varias sustancias alergénicas.
Por lo general, este procedimiento se realiza a lo largo de varios años (normalmente entre 3 y 5). De esta forma, se puede lograr el máximo efecto protector. Es importante recalcar, que aparte de este tratamiento podría requerirse el empleo adicional de ciertos fármacos. También en ocasiones es necesario implementar medidas que, coadyuven la disminución de las concentraciones de alérgenos a nivel ambiental.
Los investigadores han logrado demostrar mediante una gran cantidad de estudios clínicos, el efecto positivo de estas vacunas. Se ha observado, que logran disminuir los síntomas y empleo de medicamentos. Ello incide de forma sustancial sobre la mejoría de la calidad de vida.
Del dicho al hecho
La inmunoterapia ha demostrado su capacidad de disminuir las posibilidades de desarrollar procesos asmáticos cuando se emplea tempranamente. De acuerdo a los expertos, puede curar a más del 95 % de las personas expuestas al veneno de avispa. Incluso, permite la recuperación de más del 90 % de las alergias causadas por las abejas.
El proceso requerido para lograr la máxima eficacia posible, conlleva una adecuada selección del paciente. Esto implica, la práctica de un diagnóstico firme empleando el o los extractos de máxima calidad. Es decir, que aporte el o los alérgenos responsables del proceso de alergia. Además de ello, es indispensable emplear las dosis correctas durante el período de tiempo adecuado.
Se ha observado, que la inmunoterapia podría beneficiar aquellos pacientes que presentan síntomas de asma, rinitis y anafilaxia. Ello incluye ciertos procesos alérgicos, que hayan sido comprobados empleando pruebas cutáneas o analíticas. Principalmente frente a ciertos alérgenos relevantes, que se encuentren asociados con la temporalidad de la sintomatología observada.
La inmunoterapia es muy importante en aquellas personas, que presentan síntomas que afectan de forma importante su calidad de vida. Y algo primordial, es que se haya comprobado que los medicamentos empleados ya no producen mejoría alguna sobre las alergias.
Otro elemento a considerar es que la enfermedad se encuentre bajo control, el ejemplo más generalizado es el del asma. Esto permitiría revertir la enfermedad, siempre y cuando no se hayan producido daños irreversibles a nivel pulmonar.
De allí la importancia de realizar el diagnóstico y tratamiento de estas enfermedades en sus fases iniciales. Vale destacar, que si alguien resulta positivo en las pruebas alérgicas pero no presenta síntomas, sería inconveniente emplear esta terapia. Tampoco debería emplearse en personas que, aun presentando síntomas alérgicos compatibles no arrojan resultados positivos en las pruebas alérgicas.
Haciendo un uso eficiente de la inmunoterapia
Los expertos sugieren, que este tratamiento no debería ser empleado en pacientes que presenten incapacidad de completarlo. Debemos recordar, que el tratamiento íntegro se lleva a cabo durante varios años. De hecho, los pacientes que no logren comprender que este tratamiento posee pros y contras, tampoco deberían de recibirlo.
En el caso de alergias comprobadas frente a venenos de abejas y avispas, las vacunas deberán considerar ciertos factores relevantes. Entre ellos destacan la gravedad de la reacción producida y el riesgo de volver a sufrir picaduras. Esto implica considerar la ocupación o aficiones de la persona tratada, a fin de mejorar su calidad de vida.
Al considerar los pacientes, que presentan reacciones graves repetidas (que incluyan síntomas respiratorios o cardiovasculares), la ITA estará indicada siempre cuando exista un alto riesgo de sufrir reacciones similares.
Los expertos sugieren que, si se producen reacciones leves en la piel y existe un bajo riesgo de sufrir picaduras, no sería necesario realizar este tratamiento. Tampoco es necesario aplicarlo si solo se presentan reacciones locales (independientemente del tamaño).
Los especialistas recomiendan acudir a centros reconocidos, que dispongan de extractos de alta calidad para el tratamiento de estas enfermedades.
Según los investigadores y especialistas, los pacientes alérgicos a un solo alérgeno como aquellos alérgicos a varios, pueden emplear ITA. De hecho, posee mayor relevancia clínica la sensibilización del paciente frente a ciertos alérgenos que el número de ellos.
Incluso, aunque se presente positividad a múltiples alérgenos, muchas veces existe una sustancia común a todas ellas, denominada panalérgeno. Esto puede favorecer en gran medida un diagnóstico definitivo.
En caso de alergias a sustancias diferentes, la decisión de emplear ITA deberá individualizarse. Esto se logra, estableciendo cuál de ellas produce síntomas más graves y persistentes. Además, que sea difícil de evitar y afecte negativamente la calidad de vida.
¿Posee algunos riesgos el empleo de la inmunoterapia?
Según el consenso de especialistas e investigadores esta terapia se considera un procedimiento seguro. Sin embargo, es posible que se presenten ocasionalmente algunos riesgos. Es decir, no es de extrañar que algunas personas alérgicas generen ciertas reacciones frente a compuestos que les causan alergias.
Los síntomas pueden aparecer en la zona donde se inyectó (reacciones locales), o lejos de ese lugar (reacciones sistémicas).
Por lo general, las reacciones locales son las que se presentan con mayor frecuencia. En la ITA, que emplea inyecciones subcutáneas, ocasionalmente se observa enrojecimiento e inflamación en la zona de inyección. Por lo general, desaparecen de forma espontánea. No obstante, las molestias pueden atenuarse empleando terapia de frio o antihistamínicos.
Cuando se emplea ITA sublingual, las reacciones locales por lo general afectan solo la cavidad oral y desaparecen rápidamente con las sucesivas dosis. Debemos aclarar que, las reacciones locales no condicionan la aparición de reacciones sistémicas.
Dentro de las reacciones sistémicas que suelen presentarse se mencionan:
Urticaria
Asma
Rinitis
Náuseas
Vómitos
Procesos diarreicos
Mareos
Desmayos
Malestar general
Escozor a nivel axilar, cuero cabelludo, plantas de pies y palmas de las manos
Cefalea.
Los especialistas sugieren, que cuando se presente esta sintomatología se debe actuar rápidamente. Se ha observado, que la incidencia y gravedad de estos efectos negativos se reducen grandemente en las unidades de inmunoterapia.
Ello se debe principalmente a que la ITA, es supervisada por profesionales en alergología. Además de ello, se refuerza porque generalmente en estos lugares especializados, se realiza un proceso de observación. Esto reduce la presencia de complicaciones luego de administrada la vacuna.
Concluyendo
Según la OMS, el impacto económico de las enfermedades alérgicas equivale al 1% de los recursos sanitarios a nivel mundial. Ello sitúa estas patologías a un nivel similar a la diabetes y enfermedades neurodegenerativas. Según los expertos, diversas enfermedades alérgicas causan desequilibrios, que trastocan los proyectos de vida de muchas personas.
Se ha establecido por ejemplo que, el 20% de los pacientes asmáticos sufren de limitaciones al momento de elegir una carrera. Esto se ha observado también en gran medida en quienes presentan dermatitis atópica o procesos de urticaria crónica.
Las alergias afectan diversos sistemas y órganos de nuestro cuerpo. Los más comúnmente afectados por las reacciones alérgicas, son las vías respiratorias, sistemas digestivo, cardiovascular y piel. Las alergias producen una serie de síntomas, que para muchas personas representan una enorme carga física y psicológica.
Una gran cantidad de personas acude con mucha frecuencia a los fármacos, pero solo consiguen un alivio pasajero. Y en muchas ocasiones, generan efectos secundarios.
La ciencia, al tomar en cuenta un basamento desarrollado hace siglos, emplea actualmente la inmunoterapia. Sin embargo, su efectividad no es igual sobre todos los tipos de alérgenos ni de alergias. De hecho, se recomienda la comprobación de que los medicamentos empleados ya no producen mejoría sobre las alergias.
Para Tisha la información recibida, que también comparto con vosotros en el post, fue de mucha utilidad. Incluso, pudo captar que a veces se pasan por alto algunas situaciones importantes para la salud. Por ello, acudió a un alergólogo referida por su médico de familia.
La última vez que se comunicó conmigo estaba realizando las pruebas necesarias a fin de iniciar el tratamiento inmunológico. Ella lo hizo, pensando en una cura a largo plazo. Sobre todo, que le permitiera mantenerse cercana a su pasión: restaurar muebles antiguos de madera.
“Una vez establecida la eficacia de la Inmunoterapia Antialérgica (ITA) de forma incuestionable, incluido su papel como único tratamiento modificador de la enfermedad para las enfermedades alérgicas, ahora se trata de hacer que la misma sea más segura y conveniente para el paciente, de forma que más pacientes se beneficien de este tratamiento”
Dr. Harold S. Nelson
National Jewish Health, Denver, Colorado
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Referencias:
https://pubmed.ncbi.nlm.nih.gov/31733120/
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https://pubmed.ncbi.nlm.nih.gov/29205109/
https://pubmed.ncbi.nlm.nih.gov/33271297/
https://www.hopkinsmedicine.org/health/conditions-and-diseases/allergies-and-the-immune-system
https://www.nhs.uk/conditions/allergies/symptoms/https://kidshealth.org/en/parents/allergy-intolerance.html
https://www.webmd.com/allergies/allergies-faq
https://www.mayoclinic.org/diseases-conditions/food-allergy/symptoms-causes/syc-20355095
